Fobaproa, la historia que AMLO no quiere volver a repetir en México


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Fotos: Cuartoscuro.com/ PMX Portal/ Nación 321

Fobaproa, la historia que AMLO no quiere volver a repetir en México

Lun 27 Abril 2020 18:53
El presidente Andrés Manuel López Obrador ha subrayado que en su administración el erario público no se usará para “rescatar” a empresas privadas, aún cuando se enfrenta una adversidad económica inédita por la epidemia de coronavirus o COVID-19. En mayor o menor medida establece que sería un paralelismo con el Fobaproa de finales de los años 90; él lo sabe muy bien pues como líder opositor en aquél entonces del PRD le tocó encabezar las críticas y el combate a una medida económica que tendrá un impacto de décadas en el país. ¿Qué es exactamente el Fobaproa?
El Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) se creó en el país en 1990, con el objetivo de tener un “colchón” de dinero en caso de enfrentar una crisis económica. Pero al desatarse "el error de diciembre" la solvencia de los bancos comenzó a agravarse por lo que el Gobierno Federal de aquel entonces decidió activar el Fobaproa, con lo que se pudieron comprar deudas a los bancos y garantizar los ahorros de miles de personas.
Durante la administración del priista Ernesto Zedillo Ponce de León (1994-2000), se avaló que el rescate bancario se transformara en deuda pública. Una reciente iniciativa presentada por diputados de Morena para transparentar quiénes se beneficiaron con ese mecanismo establece que en un inicio los pasivos del Fobaproa se calcularon en 552 mil millones de dólares.
“El Fobaproa se asumió como deuda pública a partir de 1999. Ese año se estimó que las obligaciones se pagarían en 30 años, pero un cálculo hecho por los economistas en 2006 pronosticó que serían 70 años, en el entendido de que el país tuviera un crecimiento económico anual de 4 por ciento anual, detalla la argumentación del proyecto de ley.
Andrés Manuel López Obrador fue presidente nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD) de 1996 a 1999; en ese periodo vio cómo en las elecciones federales intermedias de 1997 los partidos de oposición tuvieron una mayor presencia en la Cámara de Diputados.
Sin embargo, el PRD se quedó solo en el rechazo a que el el rescate bancario se convirtiera en deuda pública vía el Fopabroa. No solo desde San Lázaro, sino en medios, entrevistas y en sus primeros recorridos por el país, el entonces líder del sol azteca tomó como una de sus banderas ese mecanismo para ejemplificar “la corrupción” de entonces.
Más aún en 1999 López Obrador publicó su quinto libro, titulado “Fobaproa, expediente abierto: reseña y archivo”; allí calificaba ese proceso como el “fraude más grande de la historia después de La Conquista”. Reseña la forma en que se fraguó la decisión de asumir la deuda pública. La publicidad indicaba que a través de esa obra “quedaba demostrado la red de complicidades y componendas que, existe entre el poder económico y el poder político”.
El tabasqueño ocupó buena parte de esa argumentación para mantener su carrera política como líder opositor; fue una de las ofertas y banderas que mostró ante el electorado del entonces Distrito Federal y que lo llevaron hasta la jefatura de Gobierno. El resto es historia hasta llegar a 2018.
Ahora como presidente de la república rechaza todo aquello que “camine, huela y se oiga” como rescate público de entidades privadas; de ahí su formal desdén a lo que plantea un sector de los empresarios. El expediente Fobaproa sigue abierto: tan solo hasta septiembre de 2019, su gobierno ha pagado 51 mil 339 millones de pesos para y el Congreso aprobó, para 2020, desembolsar cerca de 45 mil millones de pesos.

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