Toman alcaldía de Ayala; exigen detener acueducto

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Ejidatarios del municipio morelense de Ayala y activistas del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, el Agua y el Aire de Morelos, Tlaxcala y Puebla tomaron la alcadía para exigir que se cancele la construcción de un acueducto que llevará agua a dos termoeléctricas en Huexca 
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Rubicela Morelos

Corresponsal
Periódico La Jornada
Jueves 6 de junio de 2013, p. 31
Ayala, Mor., 5 de junio.

Cientos de ejidatarios del municipio de Ayala y activistas del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, el Agua y el Aire de Morelos, Tlaxcala y Puebla, tomaron el ayuntamiento durante cinco horas este miércoles, Día Mundial del Medio Ambiente, para exigir al alcalde José Tablas Pimentel que se cancele la construcción de un acueducto con el cual se pretende llevar agua a dos termoeléctricas que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) edifica en la comunidad de Huexca, municipio de Yecapixtla.
La CFE construye el acueducto en terrenos ejidales de Ayala a fin de llevar 580 litros de agua por segundo para enfriar las turbinas de las dos plantas termoeléctricas que dos empresas españolas están edificando en Huexca, custodiadas por policías federales.
Los ejidatarios señalaron que necesitan esa agua para sus cultivos y advirtieron que la CFE pretende arrojar aguas negras al río Cuautla, lo que causará una grave contaminación.
Entre los ejidatarios inconformes estaba un nieto del general Emiliano Zapata Salazar, Jorge Zapata González, quien dijo que él y sus compañeros ya están cansados de que autoridades corruptas de los tres niveles de gobierno vendan hasta el agua que ellos requieren para sus cultivos, de los cuales se alimentan.
Aseguró que los ideales de su abuelo siguen presentes en Ayala, municipio que vio a Emiliano Zapata nacer y luchar en defensa de la tierra, la justicia y la libertad. Advirtió a las autoridades que no permitirán que se lleven su agua y que fracasará el Proyecto Morelos, en el cual se invertirán mil 600 millones de dólares e incluye la construcción de dos termoeléctricas, un gasoducto y un acueducto. Vamos a defender nuestra agua, porque ellos vienen trabajando con mañas, porque sabían que en donde iban hacer las termoeléctricas no había agua, sostuvo.
Llamó a la administración que encabeza Graco Ramírez el gobierno de la nueva ficción, porque para empezar él no lleva sangre morelense; no es zapatista. A él le interesan sus intereses personales, el dinero.
En respuesta, el alcalde panista Tablas Pimentel ofreció plantear ante el cabildo el próximo viernes que se vote la negación de cualquier licencia y/o permiso y ampliación en todo lo relacionado con el proyecto federal del acueducto para la termoeléctrica en Huexca. El alcalde firmó esta propuesta ante los ejidatarios y argumentó que el 28 de junio vence la licencia de obra que otorgó la pasada administración municipal para edificar el acueducto.
Los ejidatarios de Ayala llegaron al ayuntamiento a las 10 horas para protestar contra Tablas Pimentel, el gobernador Graco Ramírez y el presidente Enrique Peña Nieto, a quienes llamaron autoridades vendidas a las que no les interesa el bienestar del pueblo y se arrodillan ante el poder del dinero.
Entre los documentos que los ejidatarios han logrado reunir –la CFE y el gobierno estatal se niegan a proporcionarles información detallada sobre la obra– figura una copia de la licencia de construcción que otorgó la ex alcaldesa Francisca Callejas Castro.
También poseen un documento de la Subsecretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda estatal de la administración 2006-2012, en el cual se detalla que el acueducto medirá 12.62 kilómetros, y cruzará los municipios de Cuautla, Ayala y Yecapixtla.
Antes de que ocuparan la presidencia municipal, entregaron un documento con un punto único: solicitar la cancelación de las licencias de uso de suelo y de construcción para el acueducto en el municipio de Ayala, clausura de obra y demolición de lo construido en el municipio. Pero como el alcalde no se encontraba, decidieron ocupar la sede del ayuntamiento. El edil llegó una hora después y dialogó con ellos fuera del edificio.
El presidente municipal reconoció que el acueducto afectará a los campesinos y mermará el abasto de agua.
Los manifestantes le demandaron fijar su postura. Tablas replicó que él no entregó licencia alguna, sino su predecesora, Callejas Castillo, y que otros permisos los otorgó directamente el gobierno del estado.
En un escrito que redactaron trabajadores del ayuntamiento y una comisión de los inconformes, el alcalde prometió que su administración solicitará al gobierno estatal información sobre las condiciones en que se expidió la licencia de uso de suelo a la CFE para la construcción del tramo del acueducto en Ayala, que atraviesa los ejidos Tlayecac y San Pedro Apatlaco.
Tras la firma del acuerdo la mayoría de los ejidatarios se retiraron y algunos fueron a ver las obras del acueducto.

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