Sistema solidario de pensiones
junio 2, 2019 | Por Martín Esparza
Ha llegado el momento de realizar un diagnóstico a fondo sobre el régimen de pensiones impuesto en el gobierno de Ernesto Zedillo, en 1997, que modificó el sistema solidario de pensiones por el de cuentas individuales y que a 22 años de su puesta en marcha no garantiza una vejez digna para millones de mexicanos que con el monto a cobrar ni siquiera podrán solventar sus gastos más elementales de alimentación y el pago servicios básicos como la luz, el agua y predial.
De inicio, debe considerarse que el objetivo de la creación de las Afores no se cumplirá en ninguno de sus objetivos porque los trabajadores que en los próximos años se jubilen lo harán con el 30 por ciento de su último salario, pero habrá muchos que ni siquiera alcanzarán esta magra compensación. En el proyecto inicial se planteó que el promedio de ingresos que reportarían las cuentas individuales sería de al menos un 70 por ciento.
En todos estos años los únicos beneficiados con este modelo neoliberal de pensiones han sido los banqueros. Se estima que tan solo por el cobro del 1 por ciento de comisión en el manejo de los 3,5 billones de pesos que suman los ahorradores, los dueños de las Afores se llevan un promedio de 30 mil millones de pesos al mes.
Es hora de que los directamente interesados y afectados se organicen para plantear a los legisladores un cambio de fondo que termine con este legalizado pillaje, porque además con las reformas a la Ley del Seguro Social de 1997 y la del ISSSTE, en 2007, estos organismos fueron desmantelados y seriamente dañados en sus recursos al grado que hoy presentan la peor de sus crisis tanto por la falta de medicamentos, doctores, enfermeras e infraestructura hospitalaria.
La misma Organización Internacional del Trabajo (OIT), recomienda que a partir del fracaso en la privatización de las pensiones en muchos países del mundo, debe buscarse un nuevo modelo que no sirva para rescatar banqueros en quiebra sino para garantizar un retiro digno a millones de trabajadores.
Miles de ancianos buscan tener alguno ingreso como empacadores en los supermercados, pero muchos más, orillados por la desesperación, se ubican en las esquinas de los cruceros de todo el país, esperando que la caridad les permita llevarse un pan a la boca.
Es por esta razón que en el Sindicato Mexicanos de Electricistas (SME), se dieron cita el pasado 29 de mayo diversas organizaciones sociales en defensa de la seguridad social, con el fin de instrumentar estrategias que permitan la defensa de los derechos adquiridos por la clase trabajadora, entre estos, la legitima aspiración a una pensión justa que garantice una vejez con dignidad.
De esta Convención Nacional de Jubilados, Pensionados, Adultos Mayores, Jóvenes y Trabajadores en Activo, se darán los primeros pasos para avanzar en la construcción de objetivos comunes desde la unidad municipal, regional y nacional, porque este es un asunto que nos atañe lo mismo a viejos que a jóvenes, tanto en la lucha por pensiones justa como también de mejores condiciones de vida para la clase trabajadora en su conjunto.
Llegó la hora de exigir a los congresistas un diagnóstico serio y profundo de las pensiones y frenar toda intención de establecer un sistema universal, como ya lo han planteado en la actual legislatura diputados del PAN. Es el momento de recuperar el sistema solidario de pensiones.
Fuente
Ha llegado el momento de realizar un diagnóstico a fondo sobre el régimen de pensiones impuesto en el gobierno de Ernesto Zedillo, en 1997, que modificó el sistema solidario de pensiones por el de cuentas individuales y que a 22 años de su puesta en marcha no garantiza una vejez digna para millones de mexicanos que con el monto a cobrar ni siquiera podrán solventar sus gastos más elementales de alimentación y el pago servicios básicos como la luz, el agua y predial.
De inicio, debe considerarse que el objetivo de la creación de las Afores no se cumplirá en ninguno de sus objetivos porque los trabajadores que en los próximos años se jubilen lo harán con el 30 por ciento de su último salario, pero habrá muchos que ni siquiera alcanzarán esta magra compensación. En el proyecto inicial se planteó que el promedio de ingresos que reportarían las cuentas individuales sería de al menos un 70 por ciento.
En todos estos años los únicos beneficiados con este modelo neoliberal de pensiones han sido los banqueros. Se estima que tan solo por el cobro del 1 por ciento de comisión en el manejo de los 3,5 billones de pesos que suman los ahorradores, los dueños de las Afores se llevan un promedio de 30 mil millones de pesos al mes.
Es hora de que los directamente interesados y afectados se organicen para plantear a los legisladores un cambio de fondo que termine con este legalizado pillaje, porque además con las reformas a la Ley del Seguro Social de 1997 y la del ISSSTE, en 2007, estos organismos fueron desmantelados y seriamente dañados en sus recursos al grado que hoy presentan la peor de sus crisis tanto por la falta de medicamentos, doctores, enfermeras e infraestructura hospitalaria.
La misma Organización Internacional del Trabajo (OIT), recomienda que a partir del fracaso en la privatización de las pensiones en muchos países del mundo, debe buscarse un nuevo modelo que no sirva para rescatar banqueros en quiebra sino para garantizar un retiro digno a millones de trabajadores.
Miles de ancianos buscan tener alguno ingreso como empacadores en los supermercados, pero muchos más, orillados por la desesperación, se ubican en las esquinas de los cruceros de todo el país, esperando que la caridad les permita llevarse un pan a la boca.
Es por esta razón que en el Sindicato Mexicanos de Electricistas (SME), se dieron cita el pasado 29 de mayo diversas organizaciones sociales en defensa de la seguridad social, con el fin de instrumentar estrategias que permitan la defensa de los derechos adquiridos por la clase trabajadora, entre estos, la legitima aspiración a una pensión justa que garantice una vejez con dignidad.
De esta Convención Nacional de Jubilados, Pensionados, Adultos Mayores, Jóvenes y Trabajadores en Activo, se darán los primeros pasos para avanzar en la construcción de objetivos comunes desde la unidad municipal, regional y nacional, porque este es un asunto que nos atañe lo mismo a viejos que a jóvenes, tanto en la lucha por pensiones justa como también de mejores condiciones de vida para la clase trabajadora en su conjunto.
Llegó la hora de exigir a los congresistas un diagnóstico serio y profundo de las pensiones y frenar toda intención de establecer un sistema universal, como ya lo han planteado en la actual legislatura diputados del PAN. Es el momento de recuperar el sistema solidario de pensiones.
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