El gobierno no tiene palabra; mintió para aprobar la reforma, sostienen petroleros

Patricia Muñoz Ríos

 

Periódico La Jornada
Martes 2 de agosto de 2016, p. 5

Fue un engaño del gobierno federal que con la reforma energética fueran a reducirse los precios de las gasolinas, la electricidad y el gas; por el contrario, siguen elevando su costo y afectan el bolsillo de los mexicanos, señalaron integrantes de la Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros, en un mitin que llevaron a cabo ayer frente a la Secretaría de Energía.

Plantearon que están a la vista las afectaciones que ha traído al pueblo de México esa reforma, pues además de continuar incrementándose los costos de estos bienes, las únicas ganadoras con la nueva legislación en la materia son las grandes trasnacionales.
Agregaron que se han afectado sus derechos laborales, como el de servicio médico, y están acabando con su contrato colectivo de trabajo.
Con mantas en las que exigían la abrogación de la citada reforma, debido a que fue impulsada por las autoridades con mentiras, los técnicos y profesionistas petroleros hicieron ver que no es sostenible una modificación de leyes que ha devenido en una sangría para los mexicanos. El gobierno federal ha faltado a su palabra, señalaron.
No ha habido ni un beneficio para el pueblo, sino sólo para el gran capital con la modificación de leyes en materia energética, expusieron en la movilización y llamaron a detener el desmembramiento de la industria petrolera nacional.

En el mitin leyeron un pronunciamiento en el que sostuvieron que además de que la reforma energética está dejando en manos de extranjeros un sector estratégico para el país, no se ha detenido el despido de personal técnico especializado en Pemex, y tampoco se ha cumplido el compromiso gubernamental de que se respetarían las plazas y condiciones laborales.
Consideraron muy grave la cancelación de los servicios médicos para los trabajadores de Pemex y la escasez de fármacos. Indicaron que eso ocurre desde 2010, cuando a los trabajadores activos y jubilados que recurren al servicio médico les empezaron a negar el suministro de medicinas, y en la mayoría de los casos tuvieron que comprarlas en farmacias comerciales, haciendo luego diversos trámites para el rembolso de los gastos.
No obstante, esta situación empeoró al grado de que en diversas plazas de Pemex, sobre todo en Sonora y Baja California, mandan a los trabajadores que se atiendan de manera particular y les dicen que luego les reembolsarán los gastos, lo cual no ocurre tampoco, por lo que los trabajadores están perdiendo derechos fundamentales, según alertaron.

 

 

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