En México ya hay un estallido social: Sicilia

Rubicela Morelos Cruz

Corresponsal

Periódico La Jornada
Viernes 27 de diciembre de 2013, p. 10

Cuernavaca, Mor., 26 de diciembre. 

El dirigente del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad, Javier Sicilia, llamó a los hombres de izquierda y de derecha a dejar de lado ideologías y unirse para movilizar a la nación en torno a la seguridad, la justicia y la paz, así como para detener las reformas estructurales.
Estos cuatro puntos, dijo, son necesarios para crear el camino hacia la paz, para unificar una lucha con el objetivo de que el Estado funcione para bien de los mexicanos, porque “no podemos continuar así como estamos, con un Estado ausente, fallido, que cada destruye y devora al país.
“Yo preguntaría a Marcos (subcomandante del Ejército Zapatista de Liberación Nacional), a Cuauhtémoc Cárdenas, a Andrés Manuel López Obrador, a Juan Ramón de la Fuente (ex rector de la Universidad Nacional Autónoma de México), a Enrique Krauze, al padre Alejandro Solalinde, al obispo Raúl Vera, a los empresarios Carlos Slim y Alejandro Martí: ¿Somos capaces de dejar nuestras pendejadas ideológicas y juntarnos y hacer un llamado fuerte a la nación y movilizarla con puntos que marquen la ruta de paz?”, expresó.

Para el poeta, en el país ya hay un estallido social, pero en este país los egos, la disputa por los liderazgos nos ha hecho mucho daño, la prueba está en la izquierda. La reforma petrolera no la pararon por la disputa de los liderazgos.
El gobierno federal que encabeza Enrique Peña intenta, igual como lo hace aquí en Morelos Graco Luis Ramírez, cambiar la realidad a través de los medios de comunicación, dijo.
El poeta puso en duda que Graco Ramírez sea de izquierda y más bien dijo que tiene características de priísta, aunque viene de la lucha del 68, pero nunca fue transparente ni coherente.
Aseguró que Graco fue irresponsable al prometer en campaña que iba a acabar con el problema de la inseguridad en 18 meses cuando ni sabía de qué tamaño era la tragedia que estaba viviendo Morelos, y le recordó que el tejido social no se reconstruye con espectáculos carísimos.

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