Niega CFE servicio a Huauchinango; alega que le corresponde a LyFC
Lunes, Mayo 12, 2014 - 22:07
Responden a usuarios “que no pueden entrar a atendernos porque existe otra empresa que está vigente”.
Un grupo de habitantes de la localidad ubicada a orillas de la presa
de Nexapa, una de las cinco que forman parte del complejo hidroeléctrico
Necaxa, se quejó de la negligencia de la CFE ante los reportes de
postes en mal estado, bajas en el voltaje y la falta de ampliación de la
red de distribución de energía eléctrica que entorpece las actividades
de tres centenas de pobladores.
Habitantes de los barrios de Acatitla y de La Mesita, afirmaron que han sido varios los llamados que han realizado al personal de la CFE por las anomalías del servicio que les prestan, sin embargo “nunca nos arreglaron ninguno de los problemas”, dijeron.
Paradójicamente, la comunidad de Papatlazolco se formó al dividirse el pueblo de Papatlatla por la construcción de la presa de Nexapa en 1929 que sirve a la hidroeléctrica Necaxa. “Los pobladores tuvieron que dejar sus casas y se fueron a los cerros, pero muy desorganizados, por ello mejor decidieron separarse y tomar su propio nombre que quiere decir papatla (hoja para hacer tamales). Comenzaron a hacer su iglesia, escuelas y pidieron sus títulos de propiedad”.
Algunos de sus fundadores, entre los que estaban Francisco “Chico rico”, Rafael Negrete, Antonio Hernández, Marcelino González, Ramos Ocotzoyitik e Ignacio Tlatic, fueron trabajadores de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, que entre 1907 y 1918, “abastecieron de energía eléctrica a los revolucionarios villistas y carrancistas”.
Sin embargo, Juan González Franco habitante del barrio de Acatitla, destacó que desde hace algunos años, el servicio registra “muy bajo voltaje. Si se conecta la televisión, la plancha y un teléfono celular, la electricidad ya no da y se corre el riesgo de que se quemen los aparatos e incluso ya ha sucedido”.
González Franco afirmó que tanto en el mal servicio como en la reparación de los daños que ha causado esta situación están “a la buena de Dios”, pues se han “quemado algunos aparatos como televisores y no hay quien responda por eso, no se sabe a quién recurrir o más bien no hay a quién reclamarle”.
Indicó que en el momento en que han hecho reportes de las fallas a la denominada “empresa de clase mundial”, simplemente les responden “que no pueden entrar a atendernos porque existe otra empresa que está vigente y sus trabajadores están en resistencia, por eso es que no pueden trabajar”.
Sin luz
Para terminar con el tema del barrio de Acatitla, dijeron que hay postes que están en malas condiciones, “desgastados y muy débiles, tanto que, seguramente con un ventarrón se podrían venir abajo, pero no se ven ganas de la CFE por repararlos”.
Mientras el barrio La Mesita carece del servicio, no hay una red de distribución y por ello solicitaron a las autoridades municipales o a quien corresponda que la extiendan pueda haber conexiones domiciliarias, debido a que desde hace varios años pidieron su electrificación pero la CFE solamente les ha recomendado hacer su solicitud a través de sus líneas telefónicas, pero no les ha dado siquiera asesoría para saber cómo realizar sus trámites.
Fuente
Habitantes de los barrios de Acatitla y de La Mesita, afirmaron que han sido varios los llamados que han realizado al personal de la CFE por las anomalías del servicio que les prestan, sin embargo “nunca nos arreglaron ninguno de los problemas”, dijeron.
Paradójicamente, la comunidad de Papatlazolco se formó al dividirse el pueblo de Papatlatla por la construcción de la presa de Nexapa en 1929 que sirve a la hidroeléctrica Necaxa. “Los pobladores tuvieron que dejar sus casas y se fueron a los cerros, pero muy desorganizados, por ello mejor decidieron separarse y tomar su propio nombre que quiere decir papatla (hoja para hacer tamales). Comenzaron a hacer su iglesia, escuelas y pidieron sus títulos de propiedad”.
Algunos de sus fundadores, entre los que estaban Francisco “Chico rico”, Rafael Negrete, Antonio Hernández, Marcelino González, Ramos Ocotzoyitik e Ignacio Tlatic, fueron trabajadores de la Compañía de Luz y Fuerza del Centro, que entre 1907 y 1918, “abastecieron de energía eléctrica a los revolucionarios villistas y carrancistas”.
Sin embargo, Juan González Franco habitante del barrio de Acatitla, destacó que desde hace algunos años, el servicio registra “muy bajo voltaje. Si se conecta la televisión, la plancha y un teléfono celular, la electricidad ya no da y se corre el riesgo de que se quemen los aparatos e incluso ya ha sucedido”.
González Franco afirmó que tanto en el mal servicio como en la reparación de los daños que ha causado esta situación están “a la buena de Dios”, pues se han “quemado algunos aparatos como televisores y no hay quien responda por eso, no se sabe a quién recurrir o más bien no hay a quién reclamarle”.
Indicó que en el momento en que han hecho reportes de las fallas a la denominada “empresa de clase mundial”, simplemente les responden “que no pueden entrar a atendernos porque existe otra empresa que está vigente y sus trabajadores están en resistencia, por eso es que no pueden trabajar”.
Sin luz
Para terminar con el tema del barrio de Acatitla, dijeron que hay postes que están en malas condiciones, “desgastados y muy débiles, tanto que, seguramente con un ventarrón se podrían venir abajo, pero no se ven ganas de la CFE por repararlos”.
Mientras el barrio La Mesita carece del servicio, no hay una red de distribución y por ello solicitaron a las autoridades municipales o a quien corresponda que la extiendan pueda haber conexiones domiciliarias, debido a que desde hace varios años pidieron su electrificación pero la CFE solamente les ha recomendado hacer su solicitud a través de sus líneas telefónicas, pero no les ha dado siquiera asesoría para saber cómo realizar sus trámites.
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