Trabajadores multifuncionales, estrategia para cubrir ausencias por Covid-19
El Economista
Los lineamientos de seguridad en el entorno laboral le recomiendan a las empresas entrenar a su personal en las funciones que sus compañeros no podrán realizar en caso de contagio.
La “nueva normalidad” laboral traerá situaciones complejas en las empresas.
Colaboradores que realicen funciones de algún compañero ausente o
trabajadores que no podrán regresar a las instalaciones debido a que
tuvieron contacto con alguien que dio positivo a Covid-19 son algunas de
ellas.
Ante esta realidad, que será por un largo tiempo esa nueva normalidad de la que se habla a nivel mundial, los Lineamientos técnicos de seguridad sanitaria en el entorno laboral, elaborados por autoridades sanitarias y en materia del trabajo, dan una guía tanto para quienes tengan empleados a su cargo como para trabajadores.
Acerca de la carga de trabajo para
quienes estén en posibilidades de seguir laborando, los lineamientos no
sólo no rechazan que esto vaya a ocurrir, sino que la recomendación es:
“preparar al personal para que pueda asumir y realizar diferentes funciones ante posible ausentismo, incluyendo el uso de tecnologías para el teletrabajo”.
El documento oficial es una guía para que las empresas conciban un protocolo que proteja a sus colabores del contagio del coronavirus tipo SARS-CoV-2, que da origen a la enfermedad llamada Covid-19. Sin esas reglas establecidas, las compañías no pueden volver a las actividades.
En el segundo punto, de un total de siete, se debe contemplar la información y la capacitación al personal. Por lo tanto, deberán mantenerle al tanto acerca de la estrategia de retorno a actividades, “así como de sus implicaciones en el centro de trabajo”.
Con la capacitación los trabajadores deben tener claro cómo deben conducirse en las instalaciones. Por ejemplo, los nuevos horarios alternados de comidas e incluso del uso de los baños para reducir el contacto entre personas.
Pero también sobre nuevas funciones que hasta ese momento no habían realizado y que lo deberán hacer porque algún compañero esté enfermo de Covid-19, porque pertenezca a la población vulnerable o porque tuvo contacto con alguien que dio positivo a esa enfermedad y ahora no puede acceder a la empresa.
El punto 3 señala las medidas de prevención de brotes en las instalaciones. Se trata de acciones que se pondrán en marcha “cuando se sospecha o se sabe que existe una infección en el centro laboral con la finalidad de contenerla, y evitar la propagación del virus entre el personal”.
Algunas de ellas son:
“En caso de ser necesario, el personal con síntomas podrá ser remitido temporalmente al área de estancia y aislamiento definida para el control de ingreso y egreso”, se especifica en los lineamientos.
Para ello, se debe designar un espacio específico para que las personas posiblemente contagiadas puedan permanecer a la espera de que puedan trasladarse a su domicilio o a un hospital.
Además, es obligación de las empresas tener identificadas a las personas trabajadoras “que hayan estado en contacto con una persona infectada o con sospecha de infección y enviarlos a casa”. Y en tanto no se cuente con la evaluación médica que descarte que ellas no han adquirido el virus, se debe evitar su retorno, puntualiza el documento del gobierno federal.
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Los lineamientos de seguridad en el entorno laboral le recomiendan a las empresas entrenar a su personal en las funciones que sus compañeros no podrán realizar en caso de contagio.
Escrito por:
Blanca Juárez
La “nueva normalidad” laboral traerá situaciones complejas en las empresas.
Colaboradores que realicen funciones de algún compañero ausente o
trabajadores que no podrán regresar a las instalaciones debido a que
tuvieron contacto con alguien que dio positivo a Covid-19 son algunas de
ellas.Ante esta realidad, que será por un largo tiempo esa nueva normalidad de la que se habla a nivel mundial, los Lineamientos técnicos de seguridad sanitaria en el entorno laboral, elaborados por autoridades sanitarias y en materia del trabajo, dan una guía tanto para quienes tengan empleados a su cargo como para trabajadores.
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El documento oficial es una guía para que las empresas conciban un protocolo que proteja a sus colabores del contagio del coronavirus tipo SARS-CoV-2, que da origen a la enfermedad llamada Covid-19. Sin esas reglas establecidas, las compañías no pueden volver a las actividades.
En el segundo punto, de un total de siete, se debe contemplar la información y la capacitación al personal. Por lo tanto, deberán mantenerle al tanto acerca de la estrategia de retorno a actividades, “así como de sus implicaciones en el centro de trabajo”.
Con la capacitación los trabajadores deben tener claro cómo deben conducirse en las instalaciones. Por ejemplo, los nuevos horarios alternados de comidas e incluso del uso de los baños para reducir el contacto entre personas.
Pero también sobre nuevas funciones que hasta ese momento no habían realizado y que lo deberán hacer porque algún compañero esté enfermo de Covid-19, porque pertenezca a la población vulnerable o porque tuvo contacto con alguien que dio positivo a esa enfermedad y ahora no puede acceder a la empresa.
Razones para retrasar el retorno
¿Tienen derecho las empresas a negarle a un colaborador volver al centro de trabajo si tuvo contacto con alguien que dio positivo al nuevo coronavirus? La respuesta es sí, de acuerdo con lo establecido por las autoridades federales en los lineamientos para el retorno laboral.El punto 3 señala las medidas de prevención de brotes en las instalaciones. Se trata de acciones que se pondrán en marcha “cuando se sospecha o se sabe que existe una infección en el centro laboral con la finalidad de contenerla, y evitar la propagación del virus entre el personal”.
Algunas de ellas son:
- Controles de acceso
- Identificación del personal infectado y de su entorno
- Acciones de aislamiento y desinfección
“En caso de ser necesario, el personal con síntomas podrá ser remitido temporalmente al área de estancia y aislamiento definida para el control de ingreso y egreso”, se especifica en los lineamientos.
Para ello, se debe designar un espacio específico para que las personas posiblemente contagiadas puedan permanecer a la espera de que puedan trasladarse a su domicilio o a un hospital.
Además, es obligación de las empresas tener identificadas a las personas trabajadoras “que hayan estado en contacto con una persona infectada o con sospecha de infección y enviarlos a casa”. Y en tanto no se cuente con la evaluación médica que descarte que ellas no han adquirido el virus, se debe evitar su retorno, puntualiza el documento del gobierno federal.
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