No se puede aceptar un acuerdo inviable, dice el nuevo ministro de Finanzas heleno

El presidente de Grecia, Prokopis Pavlopoulos, recibe al nuevo ministro de Finanzas, Euclides TsakalotosFoto Reuters

Afp, Reuters y Notimex

 

Periódico La Jornada
Martes 7 de julio de 2015, p. 3

Atenas.

Los griegos dijeron el domingo en el referendo que merecen algo mejor y no pueden aceptar un acuerdo inviable, declaró el nuevo ministro de Finanzas, Euclides Tsakalotos, tras asumir ayer el cargo para ponerse al frente de las negociaciones con los acreedores de la Unión Europea (UE), del Banco Central Europeo (BCE) y del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Al día siguiente del referendo en el que 61.31 votó oxi (no en griego) a los planes de austeridad y tasas más elevadas de impuestos que quieren imponer sus acreedores, Tsakalotos, un economista discreto de 55 años que se desempeñaba en el equipo negociador, prestó juramento como nuevo ministro de Finanzas, en sustitución de Yanis Varoufakis, quien dimitió ayer por la mañana, lo que marca un evidente cambio de estilo.
Tsakalotos estudió en la escuela privada St Paul’s de Londres y en la Universidad de Oxford, habla griego con acento británico y aparece en público en pocas ocasiones, pero no lleva las camisetas que tanto le gustan a Varoufakis.
Vamos a continuar con las discusiones. Espero que algo cambie en Europa, dijo algo agitado Tsakalotos, quien admitió experimentar miedo escénico al asumir su cargo. Tomo la situación en un momento difícil. Estoy nervioso y ansioso, declaró a la prensa.
El nuevo responsable de las finanzas ocupaba hasta ahora el cargo de ministro de Asuntos Económicos Internacionales del país mediterráneo. Nació en 1960 en Rotterdam, Holanda. Está casado con una economista escocesa.

Si los responsables europeos esperan que el nuevo ministro, que ya ha sido un negociador clave en los diálogos entre el gobierno griego y sus acreedores, tenga una postura más suave en la materia de las negociaciones, se van a llevar una decepción.
Como creador del pensamiento económico de la gobernante Syriza, es probable que Tsakalotos redoble los esfuerzos por llevar a la mesa uno de los temas más espinosos en los cinco meses de negociaciones entre Grecia y sus acreedores: el alivio de la deuda.
Tsakalotos ha sido apodado en la jerga de izquierda europeísta revolucionario: un economista que apoya la integración de la UE, pero no sus principios capitalistas.
Al igual que Varoufakis, Tsakalotos ha criticado a menudo a Europa por las grandes deficiencias democráticas, y está en contra de la austeridad fiscal ciega impuesta por el núcleo de la zona euro que ha empobrecido innecesariamente a Grecia y otros países de la periferia.
Tsakalotos es descrito como un hombre de maneras delicadas, que sabe escuchar, dotado de espíritu de análisis, sintético, muy culto, para nada el tecnócrata de base, equilibrado en su pensamiento, respetuoso de sus interlocutores, y con un gran sentido de la ética. Otros analistas dicen que tiene un perfil más diplomático y moderado que su antecesor.
Portaré el odio de los acreedores con orgullo, aseveró Varoufakis en un mensaje titulado ¡Ya no soy ministro!, en el que anunció su renuncia y que publicó ayer en su blog personal.

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