Negros presagios
Desde la Comunalidad
Jaime Martínez Luna
Guelatao de Juárez, Oaxaca
Todo lo que se comenta para el futuro, se oye triste. Control individual del Universo, inteligencia artificial, robotización, etc. La tecnología se ha adueñado del humano, luego que éste se apoderara del universo.
La humanidad está en manos de su propia creación. Concebía la tecnología como una simple herramienta para ejercer el poder y controlarlo todo, ahora esa tecnología se ha apropiado de él. El poder está en manos de las herramientas.
Paradójico todo, pues la especie humana siempre quiso controlar y dominar todo. Y así se han vivido miles y miles de años en guerras, y luchas por el poder, un poder que en la actualidad no deja de buscarse, así sea el discurso en que se sustente. Izquierda y derecha quieren el poder, el Capital, los religiosos, los ejércitos también, todavía en la actualidad a sabiendas de que ya es imposible obtenerlo, cuando se sabe que son las herramientas quienes mandan.
Pensar en nuevas fórmulas de hacer la vida, resultan una utopía irrealizable. Sin embargo, el Topos está ahí, el lugar y el tiempo que no nos abandona. Es tiempo para mandar todo al carajo y empezar de Cero. Si, respiramos y tomamos consciencia de que somos el mundo, no su centro. Que la vida no necesita dinero, ni bancos ni criptomonedas.
Habrá sociedades que sean manejadas por sus herramientas, pero habrá un nosotros que hagamos otro camino que no sea tecnológico, sino natural e integrado.
Habrá nueva educación, habrá pandemias como siempre, pero habrá nueva manera de apreciar al mundo, es decir otro lenguaje y nuevas maneras de seguir cantándole a la vida.
Desapareceremos el miedo al poder, porque será destruido. Tendremos autoridad, y seremos no iguales ni en libertad, pero entre todas las especies protegeremos los territorios que nos realizan.
¿Esto es utopía? Quizás, pero hay que caminarla.
Imagen: Alejandra Villegas (Oaxaca de Juárez, Oaxaca 1977). Tripulantes nocturnos
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