Guía de turistas en un México en llamas
Jenaro Villamil
27 de agosto de 2011
Con expresiones y actitudes de osado explorador de Discovery Channel, el presidente Felipe Calderón rebajó su investidura para servir de guía de turistas a los conductores de la serie televisiva The royal tour, a quienes llevó a las pirámides de Chichén Itzá y de Teotihuacán, a bucear en los arrecifes de Cozumel, a descender al Sótano de las Golondrinas, a bogar en una laguna de la Lacandonia… El mandatario mexicano quiere enviar un mensaje: los sitios turísticos mexicanos son seguros para los extranjeros, no están contaminados por la violencia del crimen organizado que envuelve en llamas al país…
–¿Está asustado? –le pregunta Peter Greenberg, veterano conductor de series turísticas de CBS News, a Felipe Calderón.
–No –exclama el mandatario mexicano mientras desciende como deportista de alto riesgo al Sótano de las Golondrinas, en San Luis Potosí.
“De hecho estoy disfrutando… Tengo otras tareas que son más difíciles y peligrosas en mi ejercicio como presidente”, completa Calderón en un inglés de guía de turistas.
El corte del video promocional de la serie The royal tour, que será estrenada el próximo 22 de septiembre, nos transporta a una imagen de Felipe Calderón en su despacho en Los Pinos con la banda presidencial terciada. Diserta sobre el combate al crimen organizado. Insiste en que éste es un problema que no amenaza las zonas turísticas ni a los visitantes extranjeros.
Los tiroteos en Monterrey, Ciudad Juárez, Torreón o Acapulco, zona turística por excelencia, no se mencionan en la serie. Tampoco el hecho de que una encuesta de Consulta Mitofsky levantada en marzo de 2011 reveló que 62% de los 3 mil entrevistados considera que “las cosas se están saliendo de control” en la guerra de Calderón contra el crimen organizado.
The royal tour, serie patrocinada por la Fundación José Cuervo, de la compañía tequilera, se suma a la teleserie El Equipo –financiada por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal y transmitida por el Canal 2 de Televisa entre el 9 y el 15 de mayo pasados– y a la nueva serie La Teniente, grabada con el apoyo de la Secretaría de la Marina para TV Azteca y cuyo estreno se pospuso a marzo o abril de 2012.
Ni estas teleseries ni los spots y los infomerciales que se han difundido en vísperas del V Informe de Gobierno de Felipe Calderón han modificado la percepción pública frente al fenómeno del crimen organizado. La Segunda Encuesta Nacional de Cultura Constitucional, elaborada por la UNAM y divulgada el martes 23, revela que 75% de los entrevistados reclama transparentar la información sobre la lucha contra el narcotráfico. Cerca de 70% afirmó que “en algunos casos no estoy dispuesto a apoyar las políticas del gobierno”.
El mismo Calderón ha minimizado esta percepción pública del riesgo frente a las secuelas del combate al crimen organizado. Apenas el pasado 20 de mayo durante la Cumbre Global de Viajes y Turismo, en Las Vegas, el mandatario expresó ante Peter Greenberg:
–Yo vi a miles de spring breakers divirtiéndose en México y lo que yo tengo entendido es que los únicos shots (disparos) que recibieron eran de tequila, y nada pasó.
Greenberg festejó la ocurrencia, al igual que los consejeros del World Travel and Touring Council. Y Calderón insistió: “La violencia y el crimen no están afectando a los turistas, y además se lo están pasando bien. Se pueden contar con la mano los incidentes con turistas extranjeros”.
Guía de turistas
Alguna relación promocional debe existir entre los shots de tequila mencionados por Calderón y la Fundación José Cuervo, productora del tequila del mismo nombre y patrocinadora de la serie The royal tour, grabada por el canal de televisión restringida VMe.
Gracias a ese patrocinio Calderón abandonó durante varios fines de semana sus funciones como primer mandatario para convertirse en guía de turistas en esta serie que empezó a grabarse en febrero de 2011.
En Tequila, Jalisco, después de capturar su imagen cabalgando en un nacimiento de aguas termales, cortando agave y envasando una botella, Calderón se reunió con los empresarios Francisco González, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Tequilera; Miguel Ángel Domínguez, presidente del Consejo Regulador del Tequila y Juan Beckman, presidente de la Fundación José Cuervo.
En el video promocional de The royal tour, difundido en YouTube y en la BBC World, se ve a Calderón disfrazado de buzo en el cenote sagrado de Chichén Itzá, enfundado en una guayabera contando en inglés los escalones de la pirámide de Kukulcán, rapeleando o remando en ríos, usando machetes como si fuera un experto agavero o guiando a su invitado-conductor por el santuario de la mariposa monarca en Michoacán.
La culminación de esta “aventura muy especial” es un paneo de 360 grados con la figura de Calderón solitario y triunfante en la cúspide de la pirámide de Teotihuacán, mirando el esplendor prehispánico.
“Esta no es la típica visita turística y este no es el guía tradicional”, afirma el anuncio de la BBC. Calderón se unió a un selecto club de mandatarios que han participado en The royal tour, como el rey Abdullah II de Jordania o el expresidente peruano Alejandro Toledo, quien abandonó la Presidencia de su país con 22% de aceptación, el índice más bajo en la historia de esa nación andina.
Peter Greenberg explica en el video que mientras exploraba con el presidente mexicano “las poco conocidas gemas del país”, Calderón “también me llevó dentro de su búnker de seguridad” y “discute la batalla contra los cárteles de la droga y lo que realmente representa para los turistas”.
Este el objetivo de The royal tour. Empeñado en convertir a México en la quinta potencia turística, Calderón insistió desde enero de 2011 que éste sería el “año del turismo en México”.
“El Equipo”, sin rendir cuentas
Proceso reseñó en su edición 1802 el estreno en Canal 2 de Televisa de una “telefarsa” para publicitar los logros de la SSP, encabezada por Genaro García Luna, el mismo funcionario que ha promovido “recreaciones” televisivas de detenciones de presuntos delincuentes o que transforma en reality shows las detenciones de capos del narcotráfico.
El costo oficial de la teleserie fue de 118 millones de pesos, según el contrato OM/DGRMSG/AD/022/2012 de la SSP, pero otras fuentes internas de esa dependencia insistieron ante Proceso en que el costo real ascendió a 150 millones de pesos.
La respuesta de la SSP a la solicitud de acceso a la información número 0002200 0722511 evadió responder si hubo pago o no por la utilización de equipos, helicópteros, armamento, instalaciones y demás objetos mostrados en las series El Equipo y Drenaje profundo, ésta transmitida por TV Azteca pero con menos impacto que la primera.
La Unidad de Asuntos Jurídicos de la SSP le respondió al Instituto Federal de Acceso a la Información: “No contamos con expedientes que contengan datos de la información solicitada” y desconoce si hubo pago alguno.
El Equipo generó una polémica pública por la utilización de estas instalaciones, aeronaves, armas y el búnker de la SSP para promover la ficción de un grupo de agentes especiales e incorruptibles que enfrenta a los narcotraficantes.
La producción corrió a cargo de Pedro Torres, director de Filmmates Group, dedicado a financiar con recursos de los gobiernos estatales producciones espectaculares que van desde spots hasta teleseries o informes de gobierno. El guión fue de Luis Felipe Ybarra y el director fue Carlos García Agraz.
El éxito de El Equipo fue menor al esperado a pesar del escándalo generado en los medios. El primer capítulo tuvo un rating de 17.5 puntos, menor a los 23 puntos que tuvo la telenovela El triunfo del amor, transmitida en el mismo horario. Y al final la serie terminó con un rating de apenas 13 puntos.
La polémica en torno a la producción y financiamiento de esta serie no ha culminado. El miércoles 24 la Comisión Permanente del Congreso de la Unión aprobó un punto de acuerdo para solicitarle a la Secretaría de la Función Pública que investigue las posibles irregularidades en el uso y destino de los recursos humanos y materiales asignados a la SSP y a la Policía Federal en la producción de El Equipo.
El punto de acuerdo también le solicitó a García Luna que en cinco días hábiles informe a detalle sobre “la relación del total de campañas publicitarias que desarrolla la secretaría a su cargo; el costo de cada una; el renglón del gasto que resultó afectado, como términos y condiciones del contrato”.
Demanda penal contra SSP
La diputada federal perredista Leticia Quezada, quien acusó a la SSP de violar el artículo 47 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos desde que se estrenó El Equipo, presentó el lunes 22 ante la procuradora general de la República Marisela Morales una denuncia por presunto ejercicio indebido de atribuciones y facultades, ejercicio abusivo de funciones y tráfico de influencias, entre otros delitos, contra la secretaría que encabeza García Luna.
En su denuncia, cuya copia obtuvo Proceso, Quezada Contreras argumenta que en la producción de la teleserie:
“1.- Se hizo uso de las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno federal, mismas que han sido catalogadas como estratégicas y de seguridad nacional, específicamente en el Centro de Mando de la Policía Federal de la delegación Iztapalapa, así como en las instalaciones subterráneas de su Centro de Inteligencia ubicado en Avenida Constituyentes que concentra la base de datos criminal Plataforma México.
“Ha trascendido que la grabación se realizó durante más de dos meses aprovechando las acciones de entrenamiento, despliegue, traslado y ejercicio de las distintas divisiones de la Policía Federal y sus elementos que se encuentran adscritos al Centro de Mando de Iztapalapa.
“2.- Se hizo uso de armamento propiedad del Estado Mexicano y asignado a la Secretaría de Seguridad Pública.
“3.- Se utilizó efectivos de la Secretaría de Seguridad como ‘extras’, distrayendo en consecuencia de sus cargos y funciones encomendadas a un número indeterminado de policías adscritos a la Policía Federal.
“4.- Se usó indumentaria oficial de los miembros de la Policía Federal, así como identificaciones oficiales, vehículos terrestres e incluso helicópteros Black Hawk, donados por Estados Unidos de Norteamérica como parte de la Iniciativa Mérida, todo ello propiedad del Estado Mexicano y asignado a la Secretaría de Seguridad Pública.
“5.- Se utilizaron las técnicas que los agentes federales utilizan para localizar e identificar a los sospechosos.
“6.- Se distrajeron recursos humanos de la Policía Federal para ‘capacitar’ a los actores que aparecían en el elenco principal de la serie El Equipo.”
La demanda reprocha que “ninguna de las unidades administrativas involucradas tienen información sobre si los equipos, helicópteros, armamento, instalaciones y demás objetos mostrados” en la serie “son patrimonio de alguna dependencia federal”.
También desconocen si hubo algún pago de Televisa para utilizar objetos señalados inmediatamente y no existe información sobe si los pilotos de helicópteros o conductores de vehículos blindados “están adscritos a alguna dependencia o bien son actores que utilizaron el patrimonio público”.
En síntesis, afirma en su demanda la legisladora Quezada, “los servidores públicos del sector central de la Secretaría de Seguridad Pública tienen información sumamente delicada, pues se relaciona con seguridad nacional, hecho que de suyo resulta motivo suficiente para que se inicien las indagatorias pertinentes en el marco de la averiguación previa respectiva”.
La Marina y “La teniente”
No habían amainado las secuelas del fracaso de El Equipo cuando el viernes 19 MVS Noticias reveló en el espacio conducido por Carmen Aristegui que la Secretaría de Marina también promueve una teleserie, pero en TV Azteca, llamada La teniente.
Según el reportero Juan Omar Fierro, la teleserie prevé la grabación de 24 capítulos para una primera temporada con locaciones en instalaciones navales de Acapulco, Cancún, Isla Mujeres, Veracruz y el Distrito Federal, así como en el mar. La trama incluye el uso de embarcaciones y aeronaves de la Armada de México para escenificar el rescate de migrantes, una alerta por el hallazgo de una bomba en la Ciudad de México, el plagio de un buque de guerra y el combate a “piratas modernos”.
La información señaló que desde el 28 de julio pasado el hangar de la Secretaría de Marina en el aeropuerto de la Ciudad de México se utilizó para apoyar a Televisión Azteca en el traslado de 120 personas a Acapulco.
El mismo día la Unidad de Comunicación de la Secretaría de Marina confirmó al periódico El Universal que sí se producirá la serie La teniente, pero se apresuró a afirmar que la dependencia “no pagará un solo peso” para la realización del programa.
Alberto Santini, director de Azteca 13 y Azteca Novelas, afirmó que La teniente promoverá la labor de la Secretaría de Marina.
“Estamos contentos de lo que está pasando y de lo que hace la Marina para ayudar y estar con los mexicanos para salvaguardarnos y es importante lo que se está haciendo con esta obra maestra”, afirmó el directivo de TV Azteca.
La producción de la serie correrá a cargo de Benjamín Salinas y Roberto González y el costo aproximado sería de 5 millones de dólares, pero no quedó claro quién la patrocinará.
Hasta ahora sólo se han grabado tres capítulos en el Distrito Federal, Acapulco e Isla Mujeres y la transmisión se pospuso hasta abril o marzo de 2012 frente al escándalo que se generó por el caso de El Equipo. Algunos reportes internos de la Secretaría de Marina indican que la serie se podría cancelar, aunque insisten en que ninguno de los elementos participa como “extra” y que todo está dentro del marco de los reglamentos.
Para la diputada Quezada el problema con esta serie es el mismo que con El Equipo: “La utilización de recursos públicos y la falta de transparencia en los convenios entre estas dependencias y las televisoras”.
–La Secretaría de Marina insiste en que no destinaron ningún peso en la producción –se le comenta.
–La Marina dice que no pero ¿a poco una televisión comercial va a producir gratis algo para favorecer a una dependencia gubernamental? –se pregunta la legisladora.
“Esto de las teleseries es una burla muy fuerte. Es una forma de operar del gobierno de Calderón para lavar la imagen nacional e internacional”, sentenció la legisladora.
Fuente
27 de agosto de 2011
Con expresiones y actitudes de osado explorador de Discovery Channel, el presidente Felipe Calderón rebajó su investidura para servir de guía de turistas a los conductores de la serie televisiva The royal tour, a quienes llevó a las pirámides de Chichén Itzá y de Teotihuacán, a bucear en los arrecifes de Cozumel, a descender al Sótano de las Golondrinas, a bogar en una laguna de la Lacandonia… El mandatario mexicano quiere enviar un mensaje: los sitios turísticos mexicanos son seguros para los extranjeros, no están contaminados por la violencia del crimen organizado que envuelve en llamas al país…
–¿Está asustado? –le pregunta Peter Greenberg, veterano conductor de series turísticas de CBS News, a Felipe Calderón.
–No –exclama el mandatario mexicano mientras desciende como deportista de alto riesgo al Sótano de las Golondrinas, en San Luis Potosí.
“De hecho estoy disfrutando… Tengo otras tareas que son más difíciles y peligrosas en mi ejercicio como presidente”, completa Calderón en un inglés de guía de turistas.
El corte del video promocional de la serie The royal tour, que será estrenada el próximo 22 de septiembre, nos transporta a una imagen de Felipe Calderón en su despacho en Los Pinos con la banda presidencial terciada. Diserta sobre el combate al crimen organizado. Insiste en que éste es un problema que no amenaza las zonas turísticas ni a los visitantes extranjeros.
Los tiroteos en Monterrey, Ciudad Juárez, Torreón o Acapulco, zona turística por excelencia, no se mencionan en la serie. Tampoco el hecho de que una encuesta de Consulta Mitofsky levantada en marzo de 2011 reveló que 62% de los 3 mil entrevistados considera que “las cosas se están saliendo de control” en la guerra de Calderón contra el crimen organizado.
The royal tour, serie patrocinada por la Fundación José Cuervo, de la compañía tequilera, se suma a la teleserie El Equipo –financiada por la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal y transmitida por el Canal 2 de Televisa entre el 9 y el 15 de mayo pasados– y a la nueva serie La Teniente, grabada con el apoyo de la Secretaría de la Marina para TV Azteca y cuyo estreno se pospuso a marzo o abril de 2012.
Ni estas teleseries ni los spots y los infomerciales que se han difundido en vísperas del V Informe de Gobierno de Felipe Calderón han modificado la percepción pública frente al fenómeno del crimen organizado. La Segunda Encuesta Nacional de Cultura Constitucional, elaborada por la UNAM y divulgada el martes 23, revela que 75% de los entrevistados reclama transparentar la información sobre la lucha contra el narcotráfico. Cerca de 70% afirmó que “en algunos casos no estoy dispuesto a apoyar las políticas del gobierno”.
El mismo Calderón ha minimizado esta percepción pública del riesgo frente a las secuelas del combate al crimen organizado. Apenas el pasado 20 de mayo durante la Cumbre Global de Viajes y Turismo, en Las Vegas, el mandatario expresó ante Peter Greenberg:
–Yo vi a miles de spring breakers divirtiéndose en México y lo que yo tengo entendido es que los únicos shots (disparos) que recibieron eran de tequila, y nada pasó.
Greenberg festejó la ocurrencia, al igual que los consejeros del World Travel and Touring Council. Y Calderón insistió: “La violencia y el crimen no están afectando a los turistas, y además se lo están pasando bien. Se pueden contar con la mano los incidentes con turistas extranjeros”.
Guía de turistas
Alguna relación promocional debe existir entre los shots de tequila mencionados por Calderón y la Fundación José Cuervo, productora del tequila del mismo nombre y patrocinadora de la serie The royal tour, grabada por el canal de televisión restringida VMe.
Gracias a ese patrocinio Calderón abandonó durante varios fines de semana sus funciones como primer mandatario para convertirse en guía de turistas en esta serie que empezó a grabarse en febrero de 2011.
En Tequila, Jalisco, después de capturar su imagen cabalgando en un nacimiento de aguas termales, cortando agave y envasando una botella, Calderón se reunió con los empresarios Francisco González, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Tequilera; Miguel Ángel Domínguez, presidente del Consejo Regulador del Tequila y Juan Beckman, presidente de la Fundación José Cuervo.
En el video promocional de The royal tour, difundido en YouTube y en la BBC World, se ve a Calderón disfrazado de buzo en el cenote sagrado de Chichén Itzá, enfundado en una guayabera contando en inglés los escalones de la pirámide de Kukulcán, rapeleando o remando en ríos, usando machetes como si fuera un experto agavero o guiando a su invitado-conductor por el santuario de la mariposa monarca en Michoacán.
La culminación de esta “aventura muy especial” es un paneo de 360 grados con la figura de Calderón solitario y triunfante en la cúspide de la pirámide de Teotihuacán, mirando el esplendor prehispánico.
“Esta no es la típica visita turística y este no es el guía tradicional”, afirma el anuncio de la BBC. Calderón se unió a un selecto club de mandatarios que han participado en The royal tour, como el rey Abdullah II de Jordania o el expresidente peruano Alejandro Toledo, quien abandonó la Presidencia de su país con 22% de aceptación, el índice más bajo en la historia de esa nación andina.
Peter Greenberg explica en el video que mientras exploraba con el presidente mexicano “las poco conocidas gemas del país”, Calderón “también me llevó dentro de su búnker de seguridad” y “discute la batalla contra los cárteles de la droga y lo que realmente representa para los turistas”.
Este el objetivo de The royal tour. Empeñado en convertir a México en la quinta potencia turística, Calderón insistió desde enero de 2011 que éste sería el “año del turismo en México”.
“El Equipo”, sin rendir cuentas
Proceso reseñó en su edición 1802 el estreno en Canal 2 de Televisa de una “telefarsa” para publicitar los logros de la SSP, encabezada por Genaro García Luna, el mismo funcionario que ha promovido “recreaciones” televisivas de detenciones de presuntos delincuentes o que transforma en reality shows las detenciones de capos del narcotráfico.
El costo oficial de la teleserie fue de 118 millones de pesos, según el contrato OM/DGRMSG/AD/022/2012 de la SSP, pero otras fuentes internas de esa dependencia insistieron ante Proceso en que el costo real ascendió a 150 millones de pesos.
La respuesta de la SSP a la solicitud de acceso a la información número 0002200 0722511 evadió responder si hubo pago o no por la utilización de equipos, helicópteros, armamento, instalaciones y demás objetos mostrados en las series El Equipo y Drenaje profundo, ésta transmitida por TV Azteca pero con menos impacto que la primera.
La Unidad de Asuntos Jurídicos de la SSP le respondió al Instituto Federal de Acceso a la Información: “No contamos con expedientes que contengan datos de la información solicitada” y desconoce si hubo pago alguno.
El Equipo generó una polémica pública por la utilización de estas instalaciones, aeronaves, armas y el búnker de la SSP para promover la ficción de un grupo de agentes especiales e incorruptibles que enfrenta a los narcotraficantes.
La producción corrió a cargo de Pedro Torres, director de Filmmates Group, dedicado a financiar con recursos de los gobiernos estatales producciones espectaculares que van desde spots hasta teleseries o informes de gobierno. El guión fue de Luis Felipe Ybarra y el director fue Carlos García Agraz.
El éxito de El Equipo fue menor al esperado a pesar del escándalo generado en los medios. El primer capítulo tuvo un rating de 17.5 puntos, menor a los 23 puntos que tuvo la telenovela El triunfo del amor, transmitida en el mismo horario. Y al final la serie terminó con un rating de apenas 13 puntos.
La polémica en torno a la producción y financiamiento de esta serie no ha culminado. El miércoles 24 la Comisión Permanente del Congreso de la Unión aprobó un punto de acuerdo para solicitarle a la Secretaría de la Función Pública que investigue las posibles irregularidades en el uso y destino de los recursos humanos y materiales asignados a la SSP y a la Policía Federal en la producción de El Equipo.
El punto de acuerdo también le solicitó a García Luna que en cinco días hábiles informe a detalle sobre “la relación del total de campañas publicitarias que desarrolla la secretaría a su cargo; el costo de cada una; el renglón del gasto que resultó afectado, como términos y condiciones del contrato”.
Demanda penal contra SSP
La diputada federal perredista Leticia Quezada, quien acusó a la SSP de violar el artículo 47 de la Ley de Responsabilidades de los Servidores Públicos desde que se estrenó El Equipo, presentó el lunes 22 ante la procuradora general de la República Marisela Morales una denuncia por presunto ejercicio indebido de atribuciones y facultades, ejercicio abusivo de funciones y tráfico de influencias, entre otros delitos, contra la secretaría que encabeza García Luna.
En su denuncia, cuya copia obtuvo Proceso, Quezada Contreras argumenta que en la producción de la teleserie:
“1.- Se hizo uso de las instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública del gobierno federal, mismas que han sido catalogadas como estratégicas y de seguridad nacional, específicamente en el Centro de Mando de la Policía Federal de la delegación Iztapalapa, así como en las instalaciones subterráneas de su Centro de Inteligencia ubicado en Avenida Constituyentes que concentra la base de datos criminal Plataforma México.
“Ha trascendido que la grabación se realizó durante más de dos meses aprovechando las acciones de entrenamiento, despliegue, traslado y ejercicio de las distintas divisiones de la Policía Federal y sus elementos que se encuentran adscritos al Centro de Mando de Iztapalapa.
“2.- Se hizo uso de armamento propiedad del Estado Mexicano y asignado a la Secretaría de Seguridad Pública.
“3.- Se utilizó efectivos de la Secretaría de Seguridad como ‘extras’, distrayendo en consecuencia de sus cargos y funciones encomendadas a un número indeterminado de policías adscritos a la Policía Federal.
“4.- Se usó indumentaria oficial de los miembros de la Policía Federal, así como identificaciones oficiales, vehículos terrestres e incluso helicópteros Black Hawk, donados por Estados Unidos de Norteamérica como parte de la Iniciativa Mérida, todo ello propiedad del Estado Mexicano y asignado a la Secretaría de Seguridad Pública.
“5.- Se utilizaron las técnicas que los agentes federales utilizan para localizar e identificar a los sospechosos.
“6.- Se distrajeron recursos humanos de la Policía Federal para ‘capacitar’ a los actores que aparecían en el elenco principal de la serie El Equipo.”
La demanda reprocha que “ninguna de las unidades administrativas involucradas tienen información sobre si los equipos, helicópteros, armamento, instalaciones y demás objetos mostrados” en la serie “son patrimonio de alguna dependencia federal”.
También desconocen si hubo algún pago de Televisa para utilizar objetos señalados inmediatamente y no existe información sobe si los pilotos de helicópteros o conductores de vehículos blindados “están adscritos a alguna dependencia o bien son actores que utilizaron el patrimonio público”.
En síntesis, afirma en su demanda la legisladora Quezada, “los servidores públicos del sector central de la Secretaría de Seguridad Pública tienen información sumamente delicada, pues se relaciona con seguridad nacional, hecho que de suyo resulta motivo suficiente para que se inicien las indagatorias pertinentes en el marco de la averiguación previa respectiva”.
La Marina y “La teniente”
No habían amainado las secuelas del fracaso de El Equipo cuando el viernes 19 MVS Noticias reveló en el espacio conducido por Carmen Aristegui que la Secretaría de Marina también promueve una teleserie, pero en TV Azteca, llamada La teniente.
Según el reportero Juan Omar Fierro, la teleserie prevé la grabación de 24 capítulos para una primera temporada con locaciones en instalaciones navales de Acapulco, Cancún, Isla Mujeres, Veracruz y el Distrito Federal, así como en el mar. La trama incluye el uso de embarcaciones y aeronaves de la Armada de México para escenificar el rescate de migrantes, una alerta por el hallazgo de una bomba en la Ciudad de México, el plagio de un buque de guerra y el combate a “piratas modernos”.
La información señaló que desde el 28 de julio pasado el hangar de la Secretaría de Marina en el aeropuerto de la Ciudad de México se utilizó para apoyar a Televisión Azteca en el traslado de 120 personas a Acapulco.
El mismo día la Unidad de Comunicación de la Secretaría de Marina confirmó al periódico El Universal que sí se producirá la serie La teniente, pero se apresuró a afirmar que la dependencia “no pagará un solo peso” para la realización del programa.
Alberto Santini, director de Azteca 13 y Azteca Novelas, afirmó que La teniente promoverá la labor de la Secretaría de Marina.
“Estamos contentos de lo que está pasando y de lo que hace la Marina para ayudar y estar con los mexicanos para salvaguardarnos y es importante lo que se está haciendo con esta obra maestra”, afirmó el directivo de TV Azteca.
La producción de la serie correrá a cargo de Benjamín Salinas y Roberto González y el costo aproximado sería de 5 millones de dólares, pero no quedó claro quién la patrocinará.
Hasta ahora sólo se han grabado tres capítulos en el Distrito Federal, Acapulco e Isla Mujeres y la transmisión se pospuso hasta abril o marzo de 2012 frente al escándalo que se generó por el caso de El Equipo. Algunos reportes internos de la Secretaría de Marina indican que la serie se podría cancelar, aunque insisten en que ninguno de los elementos participa como “extra” y que todo está dentro del marco de los reglamentos.
Para la diputada Quezada el problema con esta serie es el mismo que con El Equipo: “La utilización de recursos públicos y la falta de transparencia en los convenios entre estas dependencias y las televisoras”.
–La Secretaría de Marina insiste en que no destinaron ningún peso en la producción –se le comenta.
–La Marina dice que no pero ¿a poco una televisión comercial va a producir gratis algo para favorecer a una dependencia gubernamental? –se pregunta la legisladora.
“Esto de las teleseries es una burla muy fuerte. Es una forma de operar del gobierno de Calderón para lavar la imagen nacional e internacional”, sentenció la legisladora.
Fuente
Comentarios