Maestros en Michoacán RECIBIERON GOLPES EN LUGAR DEL SALARIO

Secretario de Prensa del SUTIN y
El 22 de enero de 2018 los trabajadores de educación básica de Michoacán realizaron acciones de protesta en demanda de solución a demandas planteadas hace meses ante las autoridades educativas estatales. La respuesta gubernamental fue la represión con un saldo de cerca de sesenta detenidos en el transcurso de la semana, de los cuales los primeros 28 –detenidos el lunes- fueron liberados el jueves.
Esto ocurrió en el marco del paro iniciado el 17 de enero por maestros de educación básica de ese estado, mismo que se sumó al que desde el 31 de octubre iniciaron los profesores y trabajadores administrativos de la Universidad Michoacana. En ambos casos, la demanda principal es el pago de salarios, aguinaldo y prestaciones, según han denunciado los sindicatos de académicos y administrativos universitarios y la sección XVIII del sindicato magisterial.
Entre las demandas cuya solución se pide, está el incumplimiento en la contratación de egresados de las normales, a pesar de que faltan maestros, adeudos de salarios y bonos, bajas temporales, basificaciones, pagos a eventuales, personal que realiza actividades de supervisión sin contar con el nombramiento adecuado, descuentos indebidos, retrasos en la impresión de material didáctico y otros.
En el caso de los profesores de educación básica, las autoridades educativas del estado y la sección XVIII del magisterio han llegado a acuerdos para la solución de la problemática planteada. Estos, sin embargo, no se han cumplido en los plazos acordados y en lugar de soluciones, se han ido acumulando más y más problemas.
En semanas recientes, a esta serie de problemas sin solución, se agregó el incumplimiento gubernamental en el pago de salarios devengados, lo que generó amplias protestas del magisterio, ante la percepción de que no se trata de un problema de inexistencia de recursos, sino de posible desviación de los mismos y represalia por la lucha que el magisterio democrático ha emprendido hace tiempo en contra de la reforma educativa y en defensa de la educación pública, lucha en la que los maestros michoacanos han ocupado un lugar destacado.
El lunes 22 de enero, las protestas magisteriales que exigían una solución inmediata a la cadena de problemas existentes, recibieron como respuesta la represión y detención de decenas de profesoras y profesores. Aunque finalmente fueron liberados, se les amenazó incluso con que serían trasladados a penales fuera del estado y no han cesado las amenazas y detenciones.
Los problemas planteados, relacionados con aspectos administrativos y de recursos económicos, muestran falta de atención y poco interés oficial en la educación y sus trabajadores. Se trata de aspectos ya contemplados en los presupuestos correspondientes por lo que no debiera haber retrasos en su ejercicio. Para nadie es un secreto que la educación en México y sus trabajadores, no pasan por su mejor momento a causa de políticas gubernamentales más interesadas en atender los intereses del gran capital, de banqueros y transnacionales, que en cubrir las necesidades de la mayoría de la población, entre ellas las de educación y formación.
El resultado es un sistema educativo lleno de problemas de todo tipo, desde condiciones físicas inadecuadas de las escuelas, falta de material didáctico, deterioro de las condiciones laborales para los trabajadores de la educación, orientación de los programas no a la formación integral de los educandos, sino basada en criterios económicos. A esta situación el magisterio democrático ha respondido con la lucha por mejorar la educación y contra la reforma educativa que se ha tratado de imponer por el gobierno.
En el caso de la Universidad Michoacana, el paro de los trabajadores académicos y administrativos de la Universidad Michoacana se ha prolongado ya más de dos meses a causa de la falta de pago oportuno de aguinaldos y salarios. La administración de la universidad ha realizado algunos pagos parciales por lo que las asambleas de los sindicatos han decidido continuar la lucha hasta que se cubran los adeudos. En la Universidad Intercultural Indígena de Michoacán, también desde noviembre los trabajadores no reciben sus pagos. En este caso no se han afectado las labores educativas pues se encuentran hasta fines de mes en periodo vacacional.
En la Universidad Michoacana, no son nuevos los problemas. Ya desde el año pasado, ante los movimientos de huelga en defensa de sus derechos, las autoridades universitarias y laborales han actuado en contra de los de los trabajadores al dictaminar que las huelgas, de estallar, deben ser “de puertas abiertas” lo que anula el derecho de huelga consagrado en la constitución política y que reconocido asimismo en convenios internacionales signados por el gobierno mexicano.
La falta de pagos, carencias de las instituciones educativas y la represión han motivado a los trabajadores a unir sus esfuerzos. Han realizado ya acciones conjuntas y anunciaron para el lunes 29 una gran marcha conjunta en la capital michoacana. 

Comentarios