Reforma eléctrica es un “verdadero proceso” de transición energética: CFE

 

Miguel Santiago Reyes Hernández, director de CFEnergía, informó que de 2018 a 2020 México pasó del lugar 14 al 16 de los países que emiten más CO2.
Miguel Santiago Reyes Hernández, director de CFEnergía, informó que de 2018 a 2020 México pasó del lugar 14 al 16 de los países que emiten más CO2. Foto Cuartoscuro / Archivo

Ciudad de México. La reforma eléctrica brindará al país la oportunidad de contar con un verdadero proceso de transición energética ordenado y planificado, según el contexto internacional, aseguró Miguel Santiago Reyes Hernández, director general de CFEnergía y CFE Internacional.

Durante su participación en la quinta edición de la Mexico Conference 2022, organizado por la Asociación de Estudiantes Mexicanos de la Universidad de Harvard (HUMAS, por sus siglas en inglés), el funcionario señaló la importancia de aprobar los cambios constitucionales enviados por el presidente Andrés Manuel López Obrador.

El funcionario comentó que el proceso de transición está marcado por un consumo energético primario en el que prevalece el 83 por ciento del consumo de combustibles fósiles como petróleo, gas natural y carbón.

Subrayó que quienes se han pronunciado en contra de la reforma eléctrica han expresado su preocupación por las emisiones de gases efecto invernadero (GEI) debido a la generación de electricidad en México.

Sin embargo, dijo, sectores como el de transporte generan mayores emisiones de GEI, aunque es al sector de generación eléctrica recibe mayor presión y se le exige una mayor reducción dentro de las contribuciones nacionalmente determinadas.

Agregó que de 2018 a 2020, México pasó del lugar 14 al 16 en el ranking de los países que emiten mayores cantidades de CO2, con una aportación de 1 por ciento con relación al total mundial.

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Reyes Hernández mencionó que la transición energética es necesaria para el país, pero el enfoque de la transición llevada a cabo sobre las reglas de generación de energía eléctrica actuales en México ha generado impactos ambientales irreversibles; la concentración de cinco empresas privadas del 50 por ciento de la generación eólica, el fomento al mercado ilegal del autoabasto, pues en regiones como el Istmo de Tehuantepec, en Oaxaca, el 67 por ciento de los proyectos son para la venta de energía a grandes consumidores, y la concentración de seis empresas privadas de la generación de energía solar.

Ante ello, dijo, el despacho actual de energía que pone “de manera ficticia” al precio de la generación de energía limpia como el más barato, ha desplazado al portafolio de centrales de la CFE, lo que implica daños presupuestales pues debe seguir haciendo frente a compromisos de pago de largo plazo generando un saqueo permanente a la empresa productiva del Estado.

El director de CFEnergía mencionó que es importante lograr una transición energética hacia las energías limpias, pero de forma organizada e integral, lo cual implica la necesidad de mantener energía base, tarifas más accesibles, un sector energético más eficiente, un medio ambiente menos contaminado y equidad para todos los mexicanos y no solo para unos cuantos.

 

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