Logra Iusacell 2 nuevas órdenes para detener la licitación 21
Miriam Posada García
Periódico La Jornada
Martes 28 de septiembre de 2010, p. 24
Cuando la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) creían que tenían vía libre para entregar el título de concesión a Televisa-Nextel por el espectro obtenido en la licitación 21, Iusacell obtuvo dos nuevas órdenes para que se detenga el proceso y no se formalice la entrega a ese grupo de 30 megahercios a cambio de 180 millones 300 mil pesos, lo que a decir de especialistas representaría un daño patrimonial de 5 mil millones de pesos para el Estado mexicano.
Ayer, luego de acudir al juzgado cuarto de distrito en materia administrativa y al noveno tribunal colegiado de circuito para hablar con sus titulares sobre los “perjuicios” de que no proceda la licitación 21 en los términos hasta ahora llevados, el presidente de la Cofetel, Mony de Swaan, anunció que este martes el tribunal tendría que decidir si ese concurso es válido o no, y sobre esa base el juzgado cuarto debe tomar la decisión de mantener la suspensión provisional, retirarla o conceder la suspensión definitiva.
Por la tarde de ayer el comisionado presidente dijo que la decisión del noveno tribunal definiría el curso de la licitación, y que “hay altas posibilidades de que se entregue el título de concesión a Televisa-Nextel”.
Advirtió, sin embargo, que si el ministro considera que no hay condiciones para entregar el título de concesión antes del 31 de octubre, entonces la Cofetel y la SCT pedirán que se exija una garantía a la quejosa (Grupo Salinas), porque entonces Televisa-Nextel “sí recibirá un premio de mil millones de pesos” al quedar exenta del pago de derechos por dos años, cuando hay condiciones para entregar la concesión antes de esa fecha y que sólo tenga ese beneficio un año; “eso sí sería un daño patrimonial”, destacó.
Minutos después el panorama para el gobierno federal volvió a cambiar, ya que Iusacell anunció que el juzgado 27 de lo civil le otorgó una medida cautelar “que impide la entrega de títulos de concesión de la licitación 21 a favor de Televisa-Nextel”.
También dio a conocer que el juzgado décimo de distrito en materia administrativa del Distrito Federal le concedió una suspensión provisional de la entrega del título de concesión, que junto con la suspensión provisional otorgada por el juzgado cuarto sumaría tres medidas vigentes a favor de Grupo Salinas, y serían cinco las concedidas a lo largo de esta licitación que acumula más de 60 litigios, la mayoría promovidos por las empresas de Grupo Salinas. Las otras dos medidas cautelares fueron otorgadas por un juez de Acapulco y otro de Matamoros.
Mony de Swaan explicó que ayer acudió al juzgado cuarto y al noveno tribunal junto con el comisionado Gonzalo Martínez Pous, y el jefe de la Unidad de Supervisión y Verificación de la Cofetel, Manuel McFarland, para exponer las “desventajas” de que no se complete la licitación 21, “y no a ejercer presión sobre los juzgadores”.
Ahí, dijo, se expuso que si no se entrega el título de concesión a Televisa-Nextel “será una mala señal para los inversionistas” cuando se lancen nuevas licitaciones de espectro. Asimismo, “Nextel podría considerar no invertir más en el país porque tiene gran cantidad de dinero detenido”, que está presupuestado para desarrollar la infraestructura para explotar el espectro de la frecuencia de 1.7 gigahercios.
El comisionado advirtió que el Departamento de Estado de Estados Unidos está pendiente de que la licitación 21 llegue hasta la entrega del título de concesión, debido a que Nextel es una empresa estadunidense que se desempeña en un sector muy importante.
Aseguró que en ningún momento se ha considerado reponer el proceso para darle certidumbre, debido a que se ha hecho conforme a la ley. Se tardaría al menos 27 meses en relanzar la licitación y eso representaría un retraso de al menos cinco años para el sector y los usuarios mexicanos de servicios de telecomunicaciones, y sobre todo porque cualesquiera que fueran las nuevas condiciones del concurso Iusacell y el Grupo Salinas podrían volver a estar en desacuerdo e interponer otros 60 litigios en contra como ha ocurrido en este concurso. De hecho, dijo, se piensa en proponer la creación de un tribunal especializado en telecomunicaciones.
Mony de Swaan manifestó que si se llega al final de la licitación 21 los próximos concursos podrían realizarse ya sin fijar límites de acumulación de espectro y con un espíritu puramente recaudatorio, pero en el caso de la 21 no, “porque habría sido fortalecer los monopolios”.
Fuente
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Martes 28 de septiembre de 2010, p. 24
Cuando la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y la Comisión Federal de Telecomunicaciones (Cofetel) creían que tenían vía libre para entregar el título de concesión a Televisa-Nextel por el espectro obtenido en la licitación 21, Iusacell obtuvo dos nuevas órdenes para que se detenga el proceso y no se formalice la entrega a ese grupo de 30 megahercios a cambio de 180 millones 300 mil pesos, lo que a decir de especialistas representaría un daño patrimonial de 5 mil millones de pesos para el Estado mexicano.
Ayer, luego de acudir al juzgado cuarto de distrito en materia administrativa y al noveno tribunal colegiado de circuito para hablar con sus titulares sobre los “perjuicios” de que no proceda la licitación 21 en los términos hasta ahora llevados, el presidente de la Cofetel, Mony de Swaan, anunció que este martes el tribunal tendría que decidir si ese concurso es válido o no, y sobre esa base el juzgado cuarto debe tomar la decisión de mantener la suspensión provisional, retirarla o conceder la suspensión definitiva.
Por la tarde de ayer el comisionado presidente dijo que la decisión del noveno tribunal definiría el curso de la licitación, y que “hay altas posibilidades de que se entregue el título de concesión a Televisa-Nextel”.
Advirtió, sin embargo, que si el ministro considera que no hay condiciones para entregar el título de concesión antes del 31 de octubre, entonces la Cofetel y la SCT pedirán que se exija una garantía a la quejosa (Grupo Salinas), porque entonces Televisa-Nextel “sí recibirá un premio de mil millones de pesos” al quedar exenta del pago de derechos por dos años, cuando hay condiciones para entregar la concesión antes de esa fecha y que sólo tenga ese beneficio un año; “eso sí sería un daño patrimonial”, destacó.
Minutos después el panorama para el gobierno federal volvió a cambiar, ya que Iusacell anunció que el juzgado 27 de lo civil le otorgó una medida cautelar “que impide la entrega de títulos de concesión de la licitación 21 a favor de Televisa-Nextel”.
También dio a conocer que el juzgado décimo de distrito en materia administrativa del Distrito Federal le concedió una suspensión provisional de la entrega del título de concesión, que junto con la suspensión provisional otorgada por el juzgado cuarto sumaría tres medidas vigentes a favor de Grupo Salinas, y serían cinco las concedidas a lo largo de esta licitación que acumula más de 60 litigios, la mayoría promovidos por las empresas de Grupo Salinas. Las otras dos medidas cautelares fueron otorgadas por un juez de Acapulco y otro de Matamoros.
Mony de Swaan explicó que ayer acudió al juzgado cuarto y al noveno tribunal junto con el comisionado Gonzalo Martínez Pous, y el jefe de la Unidad de Supervisión y Verificación de la Cofetel, Manuel McFarland, para exponer las “desventajas” de que no se complete la licitación 21, “y no a ejercer presión sobre los juzgadores”.
Ahí, dijo, se expuso que si no se entrega el título de concesión a Televisa-Nextel “será una mala señal para los inversionistas” cuando se lancen nuevas licitaciones de espectro. Asimismo, “Nextel podría considerar no invertir más en el país porque tiene gran cantidad de dinero detenido”, que está presupuestado para desarrollar la infraestructura para explotar el espectro de la frecuencia de 1.7 gigahercios.
El comisionado advirtió que el Departamento de Estado de Estados Unidos está pendiente de que la licitación 21 llegue hasta la entrega del título de concesión, debido a que Nextel es una empresa estadunidense que se desempeña en un sector muy importante.
Aseguró que en ningún momento se ha considerado reponer el proceso para darle certidumbre, debido a que se ha hecho conforme a la ley. Se tardaría al menos 27 meses en relanzar la licitación y eso representaría un retraso de al menos cinco años para el sector y los usuarios mexicanos de servicios de telecomunicaciones, y sobre todo porque cualesquiera que fueran las nuevas condiciones del concurso Iusacell y el Grupo Salinas podrían volver a estar en desacuerdo e interponer otros 60 litigios en contra como ha ocurrido en este concurso. De hecho, dijo, se piensa en proponer la creación de un tribunal especializado en telecomunicaciones.
Mony de Swaan manifestó que si se llega al final de la licitación 21 los próximos concursos podrían realizarse ya sin fijar límites de acumulación de espectro y con un espíritu puramente recaudatorio, pero en el caso de la 21 no, “porque habría sido fortalecer los monopolios”.
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