Prioridad, proteger empleo, ingreso y gasto de las familias: Peña Nieto

Foto
El presidente Enrique Peña Nieto, ayer en Los Pinos. Lo acompañan, entre otros, los secretarios del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida; de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; el dirigente de la Confederación de Trabajadores de México, Carlos Aceves del Olmo; el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, así como los titulares de Hacienda, José Antonio Meade, y de Economía, Ildefonso GuajardoFoto Cristina Rodríguez
Ángeles Cruz e Israel Rodríguez
 
Periódico La Jornada
Martes 10 de enero de 2017, p. 3
El Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y la Protección de la Economía Familiar es un primer paso para atender uno de los varios desafíos que en lo económico y social enfrentará el país este año. Y en este caso, dijo el presidente Enrique Peña Nieto, se da respuesta a las preocupaciones que generó en la sociedad el aumento a las gasolinas.
Se trata, señaló, de garantizar que no habrá aumentos injustificados en los precios de bienes y servicios, principalmente en los productos de la canasta básica, o problemas de escasez de alimentos. Tampoco habrá despidos de trabajadores ni recortes en los programas sociales o aumento en las tarifas del transporte.
El titular del Ejecutivo federal encabezó ayer el acto de presentación del pacto en Los Pinos, donde representantes de los sectores obrero, agropecuario –afines al Partido Revolucionario Institucional– y empresarial suscribieron el acuerdo e hicieron patente su respaldo a la decisión del gobierno de la República de eliminar el subsidio a los combustibles.
Ahí, Peña Nieto resaltó que los firmantes también se comprometen a preservar el estado de derecho y fortalecer la cultura de la legalidad. Incluso, aseguró que a pesar del malestar por el incremento en los precios de las gasolinas, las familias mexicanas también se han pronunciado en contra de la violencia y el vandalismo.
Luego hizo un amplio reconocimiento al sentido de solidaridad y responsabilidad social de agrupaciones como las confederaciones de Trabajadores de México, la Nacional Campesina y el Consejo Coordinador Empresarial –que firmaron el acuerdo– para acompañar a los sectores más desfavorecidos y conservar la estabilidad económica del país. En el salón también estaban presentes representantes de cámaras industriales y de comercio, de la industria automotriz e integrantes del gabinete legal y ampliado.
Aquí no hay, ni cabe, el interés personal, político o de grupo. Nuestro único interés es México. En unidad ‘‘podremos superar y vencer cualquier desafío’’, subrayó Peña Nieto, y enseguida se dirigió a la población en general para señalar que la prioridad del gobierno de la República es proteger el empleo, el ingreso y el gasto de las familias. ‘‘Es una prioridad proteger tu patrimonio y tu ahorro, la estabilidad, tu futuro y el de tus hijos’’, sostuvo.
Y siguió: ‘‘Tengan plena confianza en que haremos todo lo necesario para que el ajuste de la gasolina impacte lo menos posible en la economía familiar’’. Afirmó que, de ser necesario, se autorizarán importaciones preferenciales de productos básicos cuando se detecten aumentos de precios.
Resaltó que a diferencia de los acuerdos y pactos económicos suscritos hace 30 o 40 años, cuando el objetivo era corregir la inestabilidad económica, en esta ocasión lo que se busca es preservar lo que el país ha logrado en las pasadas décadas, justamente, la estabilidad de la economía.
El mandatario recordó que durante su gobierno se han generado más de 2.6 millones de empleos, la inflación anual en 2016 se ubicó en 3.4 por ciento y el consumo interno es el principal motor de la economía, que ahora es fuerte, dinámica y competitiva. El país avanza y entre todos debemos cuidar lo que se ha alcanzado, insistió.
También insistió en que los retos provienen del exterior. En este caso, el aumento en el precio internacional de las gasolinas, y la respuesta debe surgir en el interior con acciones como el acuerdo, que reflejan la unidad de los diferentes sectores.
Peña Nieto se sumó a la petición que antes hizo el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón, para que los otros poderes de la Unión, como la Suprema Corte de Justicia de la Nación, los organismos autónomos (INE, Inai) y los gobiernos locales, adopten medidas de austeridad como las que ha comprometido el gobierno federal en el acuerdo, entre otros, en el ejercicio del gasto y la disminución de 10 por ciento en sueldos y salarios. Es decir, planteó el titular del Ejecutivo, hacer más con menos.
Luego, agradeció a los empresarios que, además de seguir confiando e invirtiendo en México, hacen un esfuerzo adicional en favor de la estabilidad de precios y el empleo. A los trabajadores les reconoció el compromiso para continuar elevando la competitividad y la productividad de la economía nacional y reconoció que las revisiones salariales se hagan con base en indicadores precisos sobre el impacto que tuvo el alza en el precio de la gasolina.
De igual forma, el Presidente reconoció a los representantes del sector agropecuario su compromiso de seguir produciendo alimentos de calidad a precios justos. Subrayó que el acuerdo es un marco al que se sumarán acciones y compromisos adicionales, ya que el gobierno federal –dijo– seguirá trabajando con los sectores productivos para proteger la economía de las familias mexicanas.
 
 
Fuente 

Comentarios