Huelga de petroleros en Brasil contra el alza de precios de los combustibles


Afp y Dpa
 
Periódico La Jornada
Jueves 31 de mayo de 2018, p. 25
Río de Janeiro.
Trabajadores petroleros de Brasil iniciaron una huelga de 72 horas, en momentos en que los camioneros desactivan un movimiento que paralizó al país por más de una semana.
Aunque el sindicato de petroleros asegura que la huelga no generará desabasto, supone un nuevo desafío para el debilitado gobierno de Michel Temer a menos de cinco meses de las elecciones generales, marcadas por la incertidumbre.
La huelga busca la disminución de los precios del gas de cocina y de los combustibles, exige la renuncia del presidente de Petrobras, Pedro Parente, y el fin de la venta de activos de la estatal, impulsada por Temer desde que asumió el poder en 2016 tras el impeachment de la entonces mandataria, Dilma Rousseff.
Los trabajadores de Petrobras entran en huelga por 72 horas, señaló en un comunicado la Federación Única de Petroleros (FUP) que reúne a 13 sindicatos del sector y que está vinculado al Partido de los Trabajadores, dirigido por el encarcelado ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.
El anuncio llegó justo cuando la huelga de los transportistas empezaba a perder fuerza y el suministro de bienes volvía a funcionar, después de que Temer hizo concesiones en el precio del diésel y el peaje al sector.
El paro de camioneros generó una crisis de abasto en varios estados del gigante sudamericano donde gasolineras, fábricas y mercados se quedaron sin provisiones.
La huelga de petroleros desafió un fallo de la justicia laboral, que la tildó de abusiva y amenazó con penalizar a los sindicatos que la convocaron con multas hasta de 135 mil dólares por cada día de paro.
Unos 15 mil de los 30 mil sindicalizados participan en el movimiento, que afecta a una decena de refinerías y varias plantas de Petrobras en 12 entidades, indicó la FUP.
La política de Temer condujo a un aumento constante de los precios en el mercado interno en 2018. Sólo en mayo, el precio de la gasolina subió 12 por ciento y el del diésel 9.3 por ciento, según cálculos de la estatal Agencia Brasil.
La crisis estalla a casi cuatro meses de las elecciones generales, que se presentan como las más inciertas desde el retorno de la democracia, en 1985.
El favorito en las encuestas es el ex presidente Lula (2003-2010), encarcelado por supuesta corrupción y lavado de dinero, seguido de lejos por el diputado Jair Bolsonaro, un nostálgico de la época de la dictadura, quien no obstante tomó distancia de cualquier llamado a un golpe.

Fuente

Comentarios