Que las trasnacionales “no venga a saquear”, exige Manuel Bartlett

 En su comparecencia, que se prolongó por 7 horas, Manuel Bartlett Díaz, aseguró que la española Iberdrola quería que se le vendiera el gas al precio que ella quería para su planta en Veracruz

miércoles, 28 de octubre de 2020

CIUDAD DE MÉXICO (apro).- En una comparecencia que se prolongó por siete horas, el director general de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Manuel Bartlett Díaz, se pronunció porque las empresas trasnacionales “vengan a invertir y no a saquear”.

Así respondió el funcionario a preguntas de legisladores sobre la cancelación de una planta de la española Iberdrola en Veracruz.

Los inversionistas exigían que se les vendiera el gas al precio que ellos querían, se quejó. “Además, Iberdrola vende la electricidad a la CFE a precios elevados con contratos leoninos”, y advirtió que habrá que renegociarlos.

Como parte de la glosa del segundo informe presidencial, el director de la CFE compareció ante las comisiones de Energía e Infraestructura de la Cámara de Diputados, y denunció que diversas empresas privadas han declarado la guerra judicial a la política de fortalecimiento de la empresa productiva del Estado.

“Se valieron del entramado legal-institucional que garantiza el declive de la CFE frente a actores privados, bajo el cínico argumento de condiciones de competencia, alegó.

Más adelante, ante cuestionamientos de diputados sobre el supuesto desinterés del gobierno federal por las energías limpias, aseguró que a la CFE le interesa su desarrollo, por lo que repotenciarán las presas existentes y se incorporarán 22 más de uso agrícola para generar electricidad.

“La CFE no está en contra de las energías limpias. Nuestra visión es la repotenciación de las energías hidráulicas del país, que son una inversión pública valiosísima” y actualmente sólo despachan para apoyar a las plantas eólicas y solares ante su intermitencia.

Sobre la reciente carta que congresistas de Estados Unidos enviaron al presidente Donald Trump, donde manifestaron su preocupación por la política energética que está implementado el presidente Andrés Manuel López Obrador, consideró que tiene un “olor vinculado a intereses”.

Lo que buscan las empresas nacionales y extranjeras “es apoderarse del mercado mexicano que vale cuatro trillones de dólares”, consideró. 

 

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