México: Paradoja electoral
lunes 24 de enero de 2011
Laura M. López Murillo (especial para ARGENPRESS.info)
En algún lugar de la noche, en la víspera de la contienda y bajo la oscuridad que envuelve al anonimato, las huestes velan sus armas mientras esperan el inicio de la batalla...
De acuerdo con la agenda política, el 2011 será un año determinante en la configuración de los bastiones del poder: los estados conquistados, recuperados o arrebatados en la interminable contienda de la partidocracia. El calendario electoral indica la renovación de gubernaturas en los estados de Guerrero, Baja California Sur, Coahuila, Estado de México, Nayarit y Michoacán. El primer enfrentamiento de las fuerzas políticas tendrá lugar en el estado de Guerrero el próximo domingo 30 de Enero.
La importancia de esos comicios se reflejará en el nivel de la beligerancia, en la suciedad de las estrategias y en la podredumbre que se exhibe. Y entonces, en el preámbulo de los comicios se produce una cruel paradoja: cuando el proselitismo se impregna de vulgaridad y cinismo pretendiendo la simpatía de los indecisos, se agudizan el hartazgo y el desencanto del electorado que se manifiesta en niveles insultantes de abstencionismo. Por eso, sea cual fuere la tendencia en los sondeos, el porcentaje de encuestados que manifiestan desconocimiento o rechazo por el proceso electoral será superior a los márgenes de error. Hasta el momento, no hay encuesta que refleje un porcentaje de apatía menor al 5%.
Y los indicios no son alentadores: el proselitismo en el estado de Guerrero ha exacerbado a las fuerzas contendientes y las evidencias se acumulan en escándalos mediáticos: la violenta agresión al representante de la coalición PRD, PT y Convergencia, el providencial hallazgo de un camión presuntamente del DIF del Estado de México con despensas, la presencia de empleados de la fiscalía de Coahuila para fungir como representantes del PRI en los comités electorales, la divulgación de la grabación de una supuesta conversación del candidato Ángel Aguirre Rivero con una senadora perredista en la que se ofrece el respaldo de cien zacatecanos… más lo que ocurra en el apoteósico cierre de campañas.
Mientras tanto, el temor se ha desatado en Guerrero y las expectativas no son favorables: el porcentaje de guerrerenses indecisos supera el 25%, el 36% de los encuestados supone que habrá compra de votos, el 33% considera que habrá incidentes de violencia social y el 19% prevé que será necesaria la actuación del Ejército. Esta percepción que se ha generalizado proyecta el encono y la beligerancia que matizan los procesos electorales, percibidos como una lucha despiadada por el poder desde el poder, y justamente ahora, en la víspera de la contienda y bajo la oscuridad que envuelve al anonimato, las huestes velan sus armas mientras esperan el inicio de la batalla…
Laura M. López Murillo es Licenciada en Contaduría por la UNAM. Con Maestría en Estudios Humanísticos, Especializada en Literatura en el Itesm.
Fuente
Laura M. López Murillo (especial para ARGENPRESS.info)
En algún lugar de la noche, en la víspera de la contienda y bajo la oscuridad que envuelve al anonimato, las huestes velan sus armas mientras esperan el inicio de la batalla...
De acuerdo con la agenda política, el 2011 será un año determinante en la configuración de los bastiones del poder: los estados conquistados, recuperados o arrebatados en la interminable contienda de la partidocracia. El calendario electoral indica la renovación de gubernaturas en los estados de Guerrero, Baja California Sur, Coahuila, Estado de México, Nayarit y Michoacán. El primer enfrentamiento de las fuerzas políticas tendrá lugar en el estado de Guerrero el próximo domingo 30 de Enero.
La importancia de esos comicios se reflejará en el nivel de la beligerancia, en la suciedad de las estrategias y en la podredumbre que se exhibe. Y entonces, en el preámbulo de los comicios se produce una cruel paradoja: cuando el proselitismo se impregna de vulgaridad y cinismo pretendiendo la simpatía de los indecisos, se agudizan el hartazgo y el desencanto del electorado que se manifiesta en niveles insultantes de abstencionismo. Por eso, sea cual fuere la tendencia en los sondeos, el porcentaje de encuestados que manifiestan desconocimiento o rechazo por el proceso electoral será superior a los márgenes de error. Hasta el momento, no hay encuesta que refleje un porcentaje de apatía menor al 5%.
Y los indicios no son alentadores: el proselitismo en el estado de Guerrero ha exacerbado a las fuerzas contendientes y las evidencias se acumulan en escándalos mediáticos: la violenta agresión al representante de la coalición PRD, PT y Convergencia, el providencial hallazgo de un camión presuntamente del DIF del Estado de México con despensas, la presencia de empleados de la fiscalía de Coahuila para fungir como representantes del PRI en los comités electorales, la divulgación de la grabación de una supuesta conversación del candidato Ángel Aguirre Rivero con una senadora perredista en la que se ofrece el respaldo de cien zacatecanos… más lo que ocurra en el apoteósico cierre de campañas.
Mientras tanto, el temor se ha desatado en Guerrero y las expectativas no son favorables: el porcentaje de guerrerenses indecisos supera el 25%, el 36% de los encuestados supone que habrá compra de votos, el 33% considera que habrá incidentes de violencia social y el 19% prevé que será necesaria la actuación del Ejército. Esta percepción que se ha generalizado proyecta el encono y la beligerancia que matizan los procesos electorales, percibidos como una lucha despiadada por el poder desde el poder, y justamente ahora, en la víspera de la contienda y bajo la oscuridad que envuelve al anonimato, las huestes velan sus armas mientras esperan el inicio de la batalla…
Laura M. López Murillo es Licenciada en Contaduría por la UNAM. Con Maestría en Estudios Humanísticos, Especializada en Literatura en el Itesm.
Fuente
Comentarios