Calderón hereda el enredo del SME
Además de bombas de tiempo
Martín Esparza Flores
Revista Siempre!
La banda presidencial que recibió
Enrique Peña Nieto de manos de Felipe Calderón está confeccionada con
una serie de enredos y bombas de tiempo que le hereda su antecesor; no
sólo tocan a la puerta del nuevo huésped de Los Pinos agudos temas como
el de la avasallante inseguridad, también subsisten otros pendientes que
no fueron resueltos en su momento como es el asunto del Sindicato
Mexicano de Electricistas (SME).
Empecinado en no aceptar su derrota
jurídica luego de que el Segundo Tribunal Colegiado en Materia de
Trabajo del Primer Circuito emitió su fallo, el pasado 13 de
septiembre, amparando y protegiendo a los 44 mil trabajadores del SME y
a sus 22 mil jubilados, el expresidente instruyó a su secretario de
Gobernación para que anunciara que su gobierno iría a la revisión ante
la Corte. Táctica dilatoria que confirmó su desesperación por no
aparecer ante el país como lo que siempre fue: un gobernante represor y
pusilánime.
El mayúsculo enojo de Felipe Calderón
radicó en que el veredicto de los magistrados de la Segunda Sala
ordenaba a la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, la reposición
de su ilegítimo laudo que dio por válido el argumento de la “causa de
fuerza mayor” o “caso fortuito para el cierre de Luz y Fuerza del
Centro, y la terminación de las relaciones laborales con los
electricistas”. La sentencia reconoció en la Comisión Federal de
Electricidad (CFE), la obligación del gobierno federal para asumir la
figura del patrón sustituto y el resarcimiento por los salarios caídos y
prestaciones acumuladas desde la expedición del decreto de extinción
del 11 de octubre del 2009 a la fecha.
Mal jugador y peor perdedor, Calderón se
levantó de la mesa sin saldar sus deudas, no importándole dejar a los
órganos de fiscalización y vigilancia tanto de la administración
entrante como del Congreso el investigar las auténticas y torcidas
causas que llevaron a su gobierno a extinguir a la paraestatal
prohijando con ello toda una serie de actos de opacidad y corrupción y
sobre los que tendrán que responder lo mismo funcionarios del Servicio
de Administración y Enajenación de Bienes que de la CFE.
Muchas sorpresas se van a llevar los
integrantes del nuevo gabinete cuando se adentren en las obscuras
catacumbas de los vericuetos jurídicos y políticos que sirvieron de
argumentos para extinguir a Luz y Fuerza del Centro. Entenderán
claramente el porqué el Poder Judicial ha dado la razón al SME y a su
legítima demanda de justicia.
Pero hay más pendientes y bombas de tiempo haciendo tic-tac, que dejó activadas, dolosamente, el inefable exmandatario.
Comentarios