STPS elimina oficialmente el Programa de Apoyo al Empleo de sus prioridades
EL ECONOMISTA
El Programa de Apoyo al Empleo (PAE) quedó fuera de las prioridades de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS). Para el próximo año el enfoque de gasto de la política laboral estará en Jóvenes Construyendo el Futuro (JCF) y en la implementación del nuevo modelo de justicia laboral.
De acuerdo con los Precriterios Generales de Política Económica 2022 entregados al Congreso de la Unión, que incluyen los programas prioritarios del gobierno federal para el siguiente ejercicio, la STPS dejó fuera de la lista al PAE, un programa con el que operan los servicios de vinculación laboral del Servicio Nacional de Empleo (SNE), incluyendo la de los jornaleros agrícolas mexicanos con empresas de Estados Unidos y Canadá.
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En materia de recursos, las prioridades para la STPS en el siguiente año serán la “Impartición de justicia laboral”, la “Procuración de justicia laboral”, “Jóvenes Construyendo el Futuro”, los “Servicios de conciliación federal y registros laborales” y los “Subsidios a las entidades federativas para la implementación de la reforma al sistema de justicia laboral”.
Para todos los programas anteriores, la dependencia plantea un incremento en los recursos. Sin embargo, los renglones donde se concentran los mayores aumentos esperados es en JCF con 666.7 millones de pesos más de lo destinado para este año, para sumar una bolsa de 21,266 millones de pesos, y los servicios de conciliación federal y registro, con un incremento de 234.1 millones de pesos, para una partida total de 571 millones de pesos.
El Programa de Apoyo al Empleo sí estuvo contemplado por la STPS dentro de las prioridades para 2021, incluso la dependencia planteó un aumento en sus recursos. A pesar de ello, la Secretaría de Hacienda recortó el 92% del presupuesto solicitado para el programa en la propuesta final, reducción histórica que fue respaldada por la Cámara de Diputados con la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF).
Con gestiones de último momento, la dependencia logró asegurar un presupuesto cercano a los 210 millones de pesos para la operación del PAE y el SNE en el 2021, un monto mucho mejor a los 55.5 millones de pesos asignados en el PEF, pero lejano a los 704.8 millones de pesos que ejerció en 2020.
El recurso rescatado para el Programa de Apoyo al Empleo no pudo evitar una reestructuración en la oferta del Servicio Nacional de Empleo y la Secretaría del Trabajo confirmó para este año la desaparición del subprograma de capacitación para la empleabilidad, el cual consistía en el pago de becas de entre uno y tres salarios mínimos, hasta por tres meses, además de un seguro contra accidentes, para personas que tomaban un curso práctico en un centro de trabajo, a petición de los empleadores, para desarrollar o perfeccionar habilidades con la intención de ser contratadas al terminar su formación.
El SNE sólo mantuvo este año los programas de movilidad de jornaleros agrícolas y los servicios gratuitos de intermediación, los cuales incluyen las ferias y el portal de empleo, la bolsa de trabajo, el apoyo para personas que requieren trasladarse a otra localidad para insertarse a un trabajo y los talleres para los usuarios que requieren mejorar sus habilidades para la búsqueda de una oportunidad laboral.
En los últimos tres años, el PAE sufrió recortes a pesar de estar considerado en los programas prioritarios de la STPS. En el 2018 recibió una partida de 975.3 millones de pesos. En el primer año de la presente administración, en 2019, la bolsa autorizada fue 722.9 millones de pesos (-26%); para el 2020, 704.8 millones de pesos (-3%); para 2021, 55.5 millones de pesos (-92%).
Estrategia laboral inadecuada
La eliminación del PAE de entre los programas prioritarios para el presupuesto es una señal de que los recursos no están considerando en su totalidad medidas para la reactivación del mercado laboral, coinciden especialistas.
“Definitivamente, este programa no está dentro de las prioridades e incluso, pienso que no está en las prioridades desde el inicio de este sexenio, por los recortes y porque la Secretaría del Trabajo donde tiene el foco es en Jóvenes Construyendo el Futuro”, expuso Alejandra Macías, directora de Investigación del Centro de Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).
Desde la perspectiva de la especialista, “no hay un programa o una estrategia específica para la reactivación del mercado laboral”. La apuesta, subrayó, está en los microcréditos para tratar de contener despidos y las becas de Jóvenes Construyendo el Futuro; sin embargo, no son medidas suficientes para la recuperación del empleo.
Luis Mauricio Torres, coordinador de Operaciones y Análisis Económico del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) coincide en la ausencia de medidas puntuales en el presupuesto para la reactivación económica después del impacto local de la pandemia de covid-19.
“No se están destinando recursos necesariamente a programas y proyectos de reactivación económica que más podrían ayudar a las empresas y a las personas que perdieron su empleo. Hay muchos apoyos sociales, pero no todos están encaminados a pequeños y medianos empresarios que perdieron su negocio, que tuvieron que cerrar y que la están pasando mal, y para la gente que queda en el desempleo cuando bajan sus cortinas. Creo que se puede hacer mucho para mejorar la estrategia”, dijo el especialista.
¿Las prioridades están alineadas con la realidad actual? Mariana Campos, coordinadora del Programa de Gasto Público y Rendición de Cuentas de México Evalúa, opinó que, el presupuesto no se está vinculando con acciones para atender los efectos de la pandemia tanto en la economía como en el mercado laboral.
“Nos hemos ido por cumplir un programa económico y de política pública que fue pensado previo a la pandemia y que no necesariamente obedece a los retos que estamos enfrentando actualmente en el plano económico y en el plano social”, subrayó.
Los especialistas coinciden que, Jóvenes Construyendo el Futuro, programa que continuará entre las prioridades del gasto público, no sustituye la labor del Programa de Apoyo al Empleo y tampoco alcanza a cubrir a la población que atiende el Servicio Nacional de Empleo.
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