Arraigo de las cuotas sindicales, en riesgo por reforma laboral
Por Roberto Carrillo
miércoles, 30 de junio de 2010
Sindicatos tanto obreros como magisteriales temen a la reforma laboral por las implicaciones económicas que en sus agrupaciones pueda tener.
Y es que con la nueva ley, la empresa ya no retendrá a los trabajadores las contribuciones de cuotas sindicales, sino que será el propio trabajador el que dé cuenta de su aportación directamente con los dirigentes, es decir, podría dejar de ser una obligación.
Al respecto, el delegado de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en Veracruz, Alfonso Vázquez Cuevas, en su visita a Orizaba, afirmó que la reforma es justa y necesaria ya que la actual es obsoleta.
Fue claro al destacar que la creada hace más o menos 40 años, protege los derechos de los trabajadores pero inhibe la creación de nuevas plazas, lo cual, es preciso mencionar, es una realidad si se toma en cuenta que muchas agrupaciones sindicales se la pasan heredando sus puestos de trabajo.
La anterior ley, dijo, "No promueve diferentes tipos de inversión, ni categorización, ni contratación por hora como se da en otros lugares. Es una ley que no está adecuada a los tiempos en que se viven."
Vázquez Cuevas acotó que la ley de 1970 es insensible a la participación de la mujer en el trabajo, la inclusión de grupos vulnerables, la expedita justicia laboral, mayor productividad y movilidad laboral, lo cual ya es una constante a nivel mundial.
La actual reforma laboral entró en vigor el 1 de mayo de 1970 como búsqueda a la estabilidad en el empleo, la protección de los derechos laborales y de las conquistas de las organizaciones sindicales.
En contraste, la que actualmente busca aprobarse tiene como propósito favorecer la generación de empleos bien remunerados y con previsión social, adoptar medidas para proteger a los grupos en situación de vulnerabilidad e integrarlos en consecuencia a un espacio laboral.
En entrevistas por separado, diferentes líderes tanto magisteriales como obreros, se han pronunciado en contra de tal reforma pues temen que la misma sea lesiva para sus logros y conquistas sindicales.
Citando un ejemplo, la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (CONTU), a través de su líder Enrique Levet Gorozpe, citó que la propuesta impulsada por el Partido Acción Nacional (PAN), está alejada de principios y contenido social.
Por tanto, instó a los diputados en especial los priistas a que no dejen pasar la misma al considerarla como un reconocimiento al valor, empeño y esfuerzo de los trabajadores para conseguir lo que ahora tienen.
Misma reacción fue la que el dirigente del extinto Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza Flores, quien afirmó que la iniciativa tiene como finalidad desaparecer el sindicalismo mexicano y mecanizar las actividades de los trabajadores, desapareciendo de tajo los derechos laborales.
En su visita a Orizaba el 27 de abril de este año, el líder electricista acotó que no se puede seguir impulsando políticas de dictadura como la que representa el presidente Felipe Calderón Hinojosa, mismas que llevaron a su desaparición al SME.
Asimismo, la CROC, a través de su dirigente regional César Silva Reyes, afirmó que la iniciativa además de ser panista en todas sus extensiones, no puede convertir los empleos en trabajos por día, horas o contratos eventuales dado que eso propiciaría que la mano de obra carezca de estabilidad laboral.
Cifras de creación de empleo
Vázquez Cuevas afianzó que al corte de mayo del 2010, Veracruz ocupa el treceavo lugar a nivel nacional con 5 mil 487 empleos permanentes y el cuarto sitio con 13 mil 205 plazas eventuales, de acuerdo a datos del IMSS.
Nos dan una cifra aproximada de 19 mil empleos, es decir que son cifras importantes en un estado como el nuestro pero no son los suficientes; no es para quedarnos tranquilos sino para redoblar esfuerzos.
Urge –aseguró- una reforma laboral para proteger al trabajador en sus tres niveles de gobierno, La ley tiene 40 años de existir, protege los derechos de los trabajadores pero no ayuda en la generación de empleos porque no promueve diferentes tipos de inversión, categorizaciones, contratación por hora y demás.
Es una ley que no está adecuada con los tiempos que hoy vivimos y que muchas empresas hoy viven con esa traba de no poder generar mayor inversión porque la nueva ley no lo permite, eso es lo que debemos adecuar, indicó.
Fuente
miércoles, 30 de junio de 2010
Sindicatos tanto obreros como magisteriales temen a la reforma laboral por las implicaciones económicas que en sus agrupaciones pueda tener.
Y es que con la nueva ley, la empresa ya no retendrá a los trabajadores las contribuciones de cuotas sindicales, sino que será el propio trabajador el que dé cuenta de su aportación directamente con los dirigentes, es decir, podría dejar de ser una obligación.
Al respecto, el delegado de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social en Veracruz, Alfonso Vázquez Cuevas, en su visita a Orizaba, afirmó que la reforma es justa y necesaria ya que la actual es obsoleta.
Fue claro al destacar que la creada hace más o menos 40 años, protege los derechos de los trabajadores pero inhibe la creación de nuevas plazas, lo cual, es preciso mencionar, es una realidad si se toma en cuenta que muchas agrupaciones sindicales se la pasan heredando sus puestos de trabajo.
La anterior ley, dijo, "No promueve diferentes tipos de inversión, ni categorización, ni contratación por hora como se da en otros lugares. Es una ley que no está adecuada a los tiempos en que se viven."
Vázquez Cuevas acotó que la ley de 1970 es insensible a la participación de la mujer en el trabajo, la inclusión de grupos vulnerables, la expedita justicia laboral, mayor productividad y movilidad laboral, lo cual ya es una constante a nivel mundial.
La actual reforma laboral entró en vigor el 1 de mayo de 1970 como búsqueda a la estabilidad en el empleo, la protección de los derechos laborales y de las conquistas de las organizaciones sindicales.
En contraste, la que actualmente busca aprobarse tiene como propósito favorecer la generación de empleos bien remunerados y con previsión social, adoptar medidas para proteger a los grupos en situación de vulnerabilidad e integrarlos en consecuencia a un espacio laboral.
En entrevistas por separado, diferentes líderes tanto magisteriales como obreros, se han pronunciado en contra de tal reforma pues temen que la misma sea lesiva para sus logros y conquistas sindicales.
Citando un ejemplo, la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (CONTU), a través de su líder Enrique Levet Gorozpe, citó que la propuesta impulsada por el Partido Acción Nacional (PAN), está alejada de principios y contenido social.
Por tanto, instó a los diputados en especial los priistas a que no dejen pasar la misma al considerarla como un reconocimiento al valor, empeño y esfuerzo de los trabajadores para conseguir lo que ahora tienen.
Misma reacción fue la que el dirigente del extinto Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), Martín Esparza Flores, quien afirmó que la iniciativa tiene como finalidad desaparecer el sindicalismo mexicano y mecanizar las actividades de los trabajadores, desapareciendo de tajo los derechos laborales.
En su visita a Orizaba el 27 de abril de este año, el líder electricista acotó que no se puede seguir impulsando políticas de dictadura como la que representa el presidente Felipe Calderón Hinojosa, mismas que llevaron a su desaparición al SME.
Asimismo, la CROC, a través de su dirigente regional César Silva Reyes, afirmó que la iniciativa además de ser panista en todas sus extensiones, no puede convertir los empleos en trabajos por día, horas o contratos eventuales dado que eso propiciaría que la mano de obra carezca de estabilidad laboral.
Cifras de creación de empleo
Vázquez Cuevas afianzó que al corte de mayo del 2010, Veracruz ocupa el treceavo lugar a nivel nacional con 5 mil 487 empleos permanentes y el cuarto sitio con 13 mil 205 plazas eventuales, de acuerdo a datos del IMSS.
Nos dan una cifra aproximada de 19 mil empleos, es decir que son cifras importantes en un estado como el nuestro pero no son los suficientes; no es para quedarnos tranquilos sino para redoblar esfuerzos.
Urge –aseguró- una reforma laboral para proteger al trabajador en sus tres niveles de gobierno, La ley tiene 40 años de existir, protege los derechos de los trabajadores pero no ayuda en la generación de empleos porque no promueve diferentes tipos de inversión, categorizaciones, contratación por hora y demás.
Es una ley que no está adecuada con los tiempos que hoy vivimos y que muchas empresas hoy viven con esa traba de no poder generar mayor inversión porque la nueva ley no lo permite, eso es lo que debemos adecuar, indicó.
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