Villanueva iba a revelar nombres: Lydia Cacho
El Universal |
05 de Agosto del 2012 | 12:49 hrs
Dijo que ex gobernadores que ella ha denunciado se encuentran dentro de las listas de Villanueva.
El viernes se dio a conocer que la periodista, colaboradora de EL UNIVERSAL, pensaba dejar el país después de recibir nuevas amenazas contra su vida el 29 de julio.
Y aunque aclaró que su salida no es un exilio, no está dispuesta a aceptar escoltas del Estado, “pues he evidenciado a sus altos mandos: Secretaría de Seguridad Pública y Agencia Federal de Investigación (AFI) y no puedo olvidar que teniendo tres escoltas de esta agencia fue que me llevaron presa a Puebla”.
Cacho explicó que estas amenazas se dan en el contexto de varios arrestos a narcotraficantes del cártel de “Los Zetas” en Quintana Roo, pero también “en el contexto de la vuelta de los priístas a quienes ha denunciado sistemáticamente”. Sobre el origen de las amenazas, dijo que es imposible saberlo aún.
“Es difícil por la colusión que el gobierno ha tenido de manera sostenida con los cárteles de las drogas. Ahora también líderes en trata de personas y turismo sexual en mi estado. Lo que está claro, según mis asesores de seguridad, es que el tipo de intervención a mi equipo de seguridad sólo lo pudo hacer alguien con equipo satelital especializado al que sólo tienen acceso los altos mandos criminales”, agrega la periodista.
Dijo que la salida del país resulta de la “facilidad” de un vuelo directo e inmediato al extranjero.
“Eso no significa que me destierre. Si alguien debe perder su libertad son quienes cometen delitos, no quienes los investigamos, denunciamos y demostramos. Por el momento tengo protección de Artículo 19 de la Organización Nacional de Naciones Unidas (ONU) y de Amnistía Internacional”, añade.
Para Lydia Cacho, si aún está viva es porque se toma las amenazas en serio y ha documentado y entregado la evidencia a las autoridades correspondientes.
“Tampoco puedo negar que esta amenaza se da en el contexto de la preparación para presentar el caso contra el Estado mexicano y las mafias de tratantes de niñas y jóvenes ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
“Cuando una periodista evidencia con tal contundencia a hombres de poder, que el líder de `lavado` de dinero y pornografía termina con una sentencia de 113 años de prisión, se gana enemigos de por vida. Eso lo asumo, pero no estoy dispuesta a quedarme callada”, expresa la periodista.
Cacho publicó en 2005 un libro en el que saca a la luz pública una red de pornografía infantil que, al parecer, actuaba con el conocimiento y la protección de políticos y empresarios de Quintana Roo y Puebla.
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