Javier Lozano, porro de Grupo México: mineros
LÁZARO CÁRDENAS, Mich., 4 de agosto de 2010.- El secretario del Trabajo del gobierno federal, Javier Lozano Alarcón, se ha convertido en el “porro” de algunos empresarios, principalmente de Grupo México de Germán Larrea Mota de Velasco, quien lejos de coadyuvar en el equilibrio de las relaciones laborales empresas-sindicatos, utiliza el cargo para golpear a los trabajadores y el mayor perjudicado es el país, dijo aquí Javier Zúñiga, secretario general de Trabajo del Sindicato Minero.
Luego de informar a los agremiados de la Sección 271 del Sindicato Minero sobre los resultados de la revisión salarial entre el Sindicato Minero y la extrajera ArcelorMittal, con los que se evitó un paro de labores al aceptar el convenio por unanimidad, el representante de Napoleón Gómez Urrutia acusó a Lozano Alarcón de no solo ser un obstáculo para mejorar las relaciones obrero patronales.
“Más que un obstáculo este funcionario se ha convertido en el porro de algunos empresarios, particularmente de los propietarios del Grupo México, dueño de las mina de Cananea, de la de Zacatecas y la de Taxco, Guerrero, empresas que superan los tres años de estar en conflictos y a la fecha nos e avizoran soluciones”, dijo Javier Zúñiga.
Sin embargo, el representante de Gómez Urrutia expresó su confianza en que haya un cambio con el nuevo Secretario de Gobernación, con quien ya buscan acercamientos y confían en que la próxima semana se concrete una reunión “en la que seguramente habrá un cambio de actitud y una valoración más acertada de los razonamientos por los que no han sido superados los conflictos existentes”, adelantó el funcionario sindical.
Parece que el reloj de Napoleón es el actual sexenio, se le cuestionó al allegado de Gómez Urrutia. “La verdad no lo vemos así, pese a que así lo interpretan muchos, nosotros confiamos, y es la confianza que nos ha expresado el compañero Napoleón, en que el señor presidente de la República reflexione y acepte el acercamiento que reiteradamente le hemos expresado, más que un enemigo, Gómez Urrutia puede ser un aliado del país para superar la crisis que se vive en la industria del acero y de los metales, y en ese sentido tenemos confianza en que el señor secretario de Gobernación nos conceda el espacio para despejar muchas contradicciones y falsedades que han alimentado el conflicto con el Sindicato Minero”.
Por otro lado, calificó de “necesarias” las alianzas entre los sectores afectados y golpeados por la política que viene aplicando el gobierno federal. “Al Sindicato Minero y el SME nos unen las circunstancias y muchas coincidencias, al igual que los mineros y sus dirigentes, los electricistas somos víctimas de una política errada del actual sistema de gobierno y creemos que mucho tiene que ver en el “porrismo” del secretario del Trabajo, Javier Lozano”, calificó el líder minero.
por cuanto a la revisión salarial de la Sección 271, cuya asamblea aceptó por unanimidad el 8 por ciento de aumento directo al salario y retroactivo al primero de mayo pasado, además de 16 mil pesos por cada trabajador como ayuda social por una sola vez, Javier Zúñiga calificó el arreglo como “positivo para las partes”.
En arreglos como este, dijo que las presiones del gobierno son para las empresas más no para el sindicato. “La empresa ArcelorMittal solo ofrecía el 6.5 por ciento de aumento y diez mil pesos por trabajador, pero el compañero Napoleón insistió en hacerles ver el panorama laboral del país y la conveniencia de me4jorar las condiciones de vida de los trabajadores y sus familias y pues finalmente aceptaron y hoy podemos decir que esto es logro de la buena voluntad de las partes”, dijo por último.
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Luego de informar a los agremiados de la Sección 271 del Sindicato Minero sobre los resultados de la revisión salarial entre el Sindicato Minero y la extrajera ArcelorMittal, con los que se evitó un paro de labores al aceptar el convenio por unanimidad, el representante de Napoleón Gómez Urrutia acusó a Lozano Alarcón de no solo ser un obstáculo para mejorar las relaciones obrero patronales.
“Más que un obstáculo este funcionario se ha convertido en el porro de algunos empresarios, particularmente de los propietarios del Grupo México, dueño de las mina de Cananea, de la de Zacatecas y la de Taxco, Guerrero, empresas que superan los tres años de estar en conflictos y a la fecha nos e avizoran soluciones”, dijo Javier Zúñiga.
Sin embargo, el representante de Gómez Urrutia expresó su confianza en que haya un cambio con el nuevo Secretario de Gobernación, con quien ya buscan acercamientos y confían en que la próxima semana se concrete una reunión “en la que seguramente habrá un cambio de actitud y una valoración más acertada de los razonamientos por los que no han sido superados los conflictos existentes”, adelantó el funcionario sindical.
Parece que el reloj de Napoleón es el actual sexenio, se le cuestionó al allegado de Gómez Urrutia. “La verdad no lo vemos así, pese a que así lo interpretan muchos, nosotros confiamos, y es la confianza que nos ha expresado el compañero Napoleón, en que el señor presidente de la República reflexione y acepte el acercamiento que reiteradamente le hemos expresado, más que un enemigo, Gómez Urrutia puede ser un aliado del país para superar la crisis que se vive en la industria del acero y de los metales, y en ese sentido tenemos confianza en que el señor secretario de Gobernación nos conceda el espacio para despejar muchas contradicciones y falsedades que han alimentado el conflicto con el Sindicato Minero”.
Por otro lado, calificó de “necesarias” las alianzas entre los sectores afectados y golpeados por la política que viene aplicando el gobierno federal. “Al Sindicato Minero y el SME nos unen las circunstancias y muchas coincidencias, al igual que los mineros y sus dirigentes, los electricistas somos víctimas de una política errada del actual sistema de gobierno y creemos que mucho tiene que ver en el “porrismo” del secretario del Trabajo, Javier Lozano”, calificó el líder minero.
por cuanto a la revisión salarial de la Sección 271, cuya asamblea aceptó por unanimidad el 8 por ciento de aumento directo al salario y retroactivo al primero de mayo pasado, además de 16 mil pesos por cada trabajador como ayuda social por una sola vez, Javier Zúñiga calificó el arreglo como “positivo para las partes”.
En arreglos como este, dijo que las presiones del gobierno son para las empresas más no para el sindicato. “La empresa ArcelorMittal solo ofrecía el 6.5 por ciento de aumento y diez mil pesos por trabajador, pero el compañero Napoleón insistió en hacerles ver el panorama laboral del país y la conveniencia de me4jorar las condiciones de vida de los trabajadores y sus familias y pues finalmente aceptaron y hoy podemos decir que esto es logro de la buena voluntad de las partes”, dijo por último.
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