Pacto de silencio” y crimen organizado en Tamaulipas
“pacto de silencio” hicieron Partidos Políticos para acallar el tema de la inseguridad en Tamaulipas, los hechos ocurridos en Jiménez, Victoria, Llera, Zaragoza, etc. Son innegables y preocupantes.
¿Las fuerzas armadas “vigilan” el país o evitan insurrecciones?
Luego del vergonzoso “pacto de silencio” que hicieron los Partidos Políticos para acallar el tema de la inseguridad, se han desatado una serie de atentados contra la sociedad, tras los cuales, el observador más inexperto puede ver que hay una gran carga política.
No es coincidencia que a un esfuerzo por callar se responda con una serie de atentados, favoreciendo desde luego a un Partido de cuyo seno salió la génesis de la violencia y es el principal causante de este desorden nacional.
Si la idea de Gamundi era beneficiar a sus contrincantes, la estrategia es correcta, pero si en algún momento pensó o expresó que la estrategia del silencio beneficiaría a su Partido, está muy equivocado.
En este momento (marzo/2010) hay una gran inquietud entre la población tamaulipeca por la seguridad pública, y lo menos que puede hacer un político es decirle a sus posibles votantes cómo se va a resolver el problema, seguramente no será haciendo marchas proselitistas y efectistas con orientación mediática, deben especificar cómo lo harán, y eso vale para todos los políticos en campaña.
Algunos, ante su nula propuesta, van en una dudosa marcha o se esconden para no hablar del tema.
Los hechos ocurridos en Jiménez, Victoria, Llera, Zaragoza y otras poblaciones de la entidad son innegables y preocupantes.
En Jiménez, por ejemplo, luego de la quema de un hotel y de otros actos violentos, los autobuses dpasajeros no se atreven a entrar, dan el servicio a la orilla de la carretera en detrimento de la comodidad y seguridad de los pobladores de aquel lugar.
Lo más vergonzoso es que nadie se atreve a hablar de la quema del hotel citado, de los muertos de Victoria o Llera, de los hechos de Mante, Zaragoza y otras poblaciones.
Al mutismo de los tres niveles de gobierno y de los Partidos Políticos, se suma el silencio de algunos medios de comunicación.
En consecuencia, ante unos medios mudos, la noticia se propala de boca en boca y a través de dudosas afirmaciones por internet, sin identificación, como si no hubiera una estructura informativa.
Pero dejando a un lado a quienes entran gratis o previo pago al pacto de silencio, debemos preguntarnos ¿Quién o quienes están detrás de esos hechos de violencia inéditos hasta ahora?
Tenemos tres hipótesis:
1.-Que son miembros de una banda de la delincuencia organizada que ha operado por largo tiempo en la entidad.
2.- Que son miembros de una banda de la delincuencia organizada que no opera en la entidad, pero quiere hacerlo.
3.-Que sea un grupo de élite conformado por militares especialistas en guerrilla urbana, contrainsurgencia y otras lindezas de ese tipo, usados con frecuencia para desestabilizar gobiernos, que actúan vestidos de civil y en camionetas decomisadas a delincuentes para crear pánico, inestabilidad política y otros fines político-electorales inconfesables.
Siguiendo la lógica policíaca de las corporaciones americanas e incluso de Scotland Yard y el M16, para llegar a una conclusión debemos tomar en cuenta.
1. A la delincuencia organizada le conviene mantener la plaza tranquila para que su mercancía pase con mayor facilidad.
2. Una sociedad convulsa no es propia para negocios legales o ilegales.
3. Los hechos ocurren al filo del proceso electoral al que los hechos podrían contaminar y enturbiar y eso sólo va en beneficio de un Partido Político.
4. A las fuerzas armadas regulares que vigilan el país, les conviene que haya intranquilidad para justificar su presencia que como todos sabemos es ilegal, pero se explica ante una situación violenta que si no existe, se crea.
Estas son las hipótesis, con esta información, juzgue usted.
Shiftybos
SIPREQ CORP.
¿Las fuerzas armadas “vigilan” el país o evitan insurrecciones?
Luego del vergonzoso “pacto de silencio” que hicieron los Partidos Políticos para acallar el tema de la inseguridad, se han desatado una serie de atentados contra la sociedad, tras los cuales, el observador más inexperto puede ver que hay una gran carga política.
No es coincidencia que a un esfuerzo por callar se responda con una serie de atentados, favoreciendo desde luego a un Partido de cuyo seno salió la génesis de la violencia y es el principal causante de este desorden nacional.
Si la idea de Gamundi era beneficiar a sus contrincantes, la estrategia es correcta, pero si en algún momento pensó o expresó que la estrategia del silencio beneficiaría a su Partido, está muy equivocado.
En este momento (marzo/2010) hay una gran inquietud entre la población tamaulipeca por la seguridad pública, y lo menos que puede hacer un político es decirle a sus posibles votantes cómo se va a resolver el problema, seguramente no será haciendo marchas proselitistas y efectistas con orientación mediática, deben especificar cómo lo harán, y eso vale para todos los políticos en campaña.
Algunos, ante su nula propuesta, van en una dudosa marcha o se esconden para no hablar del tema.
Los hechos ocurridos en Jiménez, Victoria, Llera, Zaragoza y otras poblaciones de la entidad son innegables y preocupantes.
En Jiménez, por ejemplo, luego de la quema de un hotel y de otros actos violentos, los autobuses dpasajeros no se atreven a entrar, dan el servicio a la orilla de la carretera en detrimento de la comodidad y seguridad de los pobladores de aquel lugar.
Lo más vergonzoso es que nadie se atreve a hablar de la quema del hotel citado, de los muertos de Victoria o Llera, de los hechos de Mante, Zaragoza y otras poblaciones.
Al mutismo de los tres niveles de gobierno y de los Partidos Políticos, se suma el silencio de algunos medios de comunicación.
En consecuencia, ante unos medios mudos, la noticia se propala de boca en boca y a través de dudosas afirmaciones por internet, sin identificación, como si no hubiera una estructura informativa.
Pero dejando a un lado a quienes entran gratis o previo pago al pacto de silencio, debemos preguntarnos ¿Quién o quienes están detrás de esos hechos de violencia inéditos hasta ahora?
Tenemos tres hipótesis:
1.-Que son miembros de una banda de la delincuencia organizada que ha operado por largo tiempo en la entidad.
2.- Que son miembros de una banda de la delincuencia organizada que no opera en la entidad, pero quiere hacerlo.
3.-Que sea un grupo de élite conformado por militares especialistas en guerrilla urbana, contrainsurgencia y otras lindezas de ese tipo, usados con frecuencia para desestabilizar gobiernos, que actúan vestidos de civil y en camionetas decomisadas a delincuentes para crear pánico, inestabilidad política y otros fines político-electorales inconfesables.
Siguiendo la lógica policíaca de las corporaciones americanas e incluso de Scotland Yard y el M16, para llegar a una conclusión debemos tomar en cuenta.
1. A la delincuencia organizada le conviene mantener la plaza tranquila para que su mercancía pase con mayor facilidad.
2. Una sociedad convulsa no es propia para negocios legales o ilegales.
3. Los hechos ocurren al filo del proceso electoral al que los hechos podrían contaminar y enturbiar y eso sólo va en beneficio de un Partido Político.
4. A las fuerzas armadas regulares que vigilan el país, les conviene que haya intranquilidad para justificar su presencia que como todos sabemos es ilegal, pero se explica ante una situación violenta que si no existe, se crea.
Estas son las hipótesis, con esta información, juzgue usted.
Shiftybos
SIPREQ CORP.
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