Empresa española busca conquistar sector eléctrico
Comentario SME: Como si nosotros no pudiéramos realizar esos trabajos también, leamos la siguiente nota.
Jueves 02 de diciembre de 2010 Eduardo Camacho | El Universaleduardo.camacho@elunversal.com.mx
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Al ser México un país clave en materia de telecomunicaciones y sector eléctrico, la firma española Jiménez Belinchón busca crecer su participación en este mercado, además del centro y sur de América. Juan Manuel Encinas Vázquez, director general de Jiménez Belinchón México, explicó que la firma opera en diferentes sectores como eléctrico, telecomunicaciones, energías renovables y eficiencia energética, construcción industrial y construcción modular, este último a través de su filial Mundoforma.
“Entre nuestra cartera de proyectos importantes destacan los destinados al sector solar fotovoltaico, termosolar, eólico, biomasa y biogás, además de la gestión y proyecto en el área de la eficiencia energética, los cuales poco se aplican en México, pero el objetivo es abrir ese nicho de mercado”, dijo.
En ese sentido, el grupo está consolidado como uno de los principales promotores de energías renovables en Italia, donde tiene previsto realizar inversiones superiores a los 150 millones de euros en los próximos tres años, para la promoción de varias plantas de biomasa, biogás y solar fotovoltaica.
La empresa, nacida en la década de los años 60 como una empresa familiar, y que ante el crecimiento constante se consolidó con un holding de empresas, llegó a México en 2009, logrando importantes contratos, aunque ya tenía presencia en el país desde 2002. Genera 85 fuentes de empleo directas y 120 indirectas, esperando crear más al invertir en una planta en el centro de la república.
¿Por qué llegar a México?
La firma tiene tres líneas de negocio: telecomunicaciones, sector eléctrico y energías renovables, y como muchos de nuestros clientes en España también tienen presencia en México —Ericcson, Telefónica—, nos parecía una sociedad natural, pues ya nos conocemos.
¿En México quiénes son sus clientes?
En el sector eléctrico participamos en licitaciones para la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que pide torres para líneas eléctricas o de telefonía. Actualmente participamos en licitaciones para el Distrito Federal y Oaxaca, entre otros; también estamos participando en una licitación de un campo solar en Agua Prieta y asociándonos con muchas empresas enfocadas a energías renovables, de manera que ellas hagan una parte y nosotros otra; pero estamos iniciando con ese tipo de energías. En telecomunicaciones para Telefónica, Telcel, Telmex, Iusacell, pero no tenemos el contrato directo con esas compañías sino a través de los fabricantes como Ericcson y Nokia por ejemplo, para llegar a los operadores.
¿Cómo están divididas sus ventas?
El 95% seguramente es del sector de telecomunicaciones mientras que el restante es del sector eléctrico y en cuanto a las energías renovables es mínimo lo que hemos logrado pues lo estamos iniciando.
¿Qué retraso tiene México en energías renovables?
En otros países el despegue de energías renovables depende mucho de los incentivos fiscales y aquí hay bastantes a la autoproducción. La parte solar tiene un buen impacto en el norte (Hermosillo y Mexicali), donde hay campos muy grandes para ello. El biogás tiene mucho apoyo sobre todo en gobiernos estatales y municipales, los eólicos están iniciando.
¿El gobierno está interesado?
Sí, está el Programa Especial para el Aprovechamiento de Energías Renovables, es del gobierno con un plazo de cuatro años. Aún falta bastante por hacer aunque ya existen proyectos funcionando en diversas zonas del país.
¿En cuántas licitaciones participan?
Con la CFE estamos en tres, en construcción modular en dos y una en energía muy grande que es la de Agua Prieta; mientras que en telecomunicaciones no se hacen licitaciones, todo se maneja por contratos. En el sector de telecomunicaciones por lo regular te encargan trabajos que pueden ir de 3 mil pesos a 6 millones de pesos; en el eléctrico es muy diferente, pueden partir de 3 a 10 millones de pesos. En promedio durante 2009 recibimos dos mil 200 pedidos de distintas cosas y queremos crecer potencialmente para cerrar 2010 con tres mil pedidos.
¿Qué nivel tienen las telecomunicaciones en México?
A diferencia de Europa y de España, aquí en México veo mucho más desarrollo, porque ahora mismo están las licitaciones de frecuencias donde participan más operados, además cuentan con mucho desarrollo de redes.
En Europa todo es más estabilizado y no hay mucho por construir, por eso vemos más posibilidades de negocio y en los próximos dos años se dará un boom en cuanto a construcción de telecomunicaciones. Los operadores actuales están muy cómodos en cómo se han realizado las cosas; la entrada de otros competidores al mercado moverá el sector y con ello la gente se beneficiará con nuevos teléfonos y mejores precios.
¿Qué tan fuerte es la competencia?
Hay mucha, por ejemplo, para empresas como Telefónica o Ericcson trabajan cinco empresas grandes y para otras de 20 a 30 como Nokia, porque muchas son pequeñas y trabajan en un estado determinado como San Luis Potosí. La diferencia entre ellas y nosotros es que buscamos tener presencia en todos los estados del centro y las Bajas Californias.
¿Qué porcentaje ocupan en el mercado?
Con los operadores grandes tenemos 20%, que es instalación de equipo, y con aquellos que estamos iniciando relaciones, como Nokia, es menor.
¿Es compleja la licitación que ustedes realizan en el sector eléctrico?
Sí, porque se compone de dos aspectos: el técnico y administrativo. En el primero tienes que cumplir con unas especificaciones que son muy características de lo que necesita CFE, por lo tanto no se trata de un producto que tengas en otro lado y puedas copiar fácilmente, sino que se desarrolla exclusivo para ellos; en el otro, la documentación que resolicitan es muy detallada; en nuestro caso, como la casa matriz está en España, tenemos que presentarles los documentos.
¿Cómo ve el sector eléctrico mexicano?
Creo que va a mejorar mucho con la adquisición (sic) de Luz y Fuerza del Centro, considero que se está trabajando mucho en la calidad del servicio; también conocemos a detalle otros proyectos que realiza CFE para renovar la red eléctrica y líneas enteras, que incluyen desde los cables hasta las torres; desde luego van a necesitar tiempo para ponerse al día porque parte del presupuesto se ha ido a la modernización del sector.
¿Todo el equipo que comercializan en México es importado?
Algunas torres sí, pero al ganar una licitación recientemente estamos viendo a estados en particular (Querétaro, Veracruz o Mexicali) donde podríamos construir una fábrica, pero todo dependerá de dónde tengamos margen de mercado y así reducir costos de transportación; probablemente en los próximos meses seguiremos importando materiales para después producirlos localmente, iniciando con accesorios para torres eléctricas y después las mismas torres. Estamos viendo posibles socios y proveedores de materia prima, por ejemplo, el hierro se podría comprar aquí y nos beneficiará mucho, pero por lo pronto nos apoyamos de las tres plantas en España.
¿Aumenta mucho el costo del producto por concepto de importación?
Al inicio pensamos que sí, pero fue todo lo contrario; cuando participamos en una licitación, resultamos ser la prestadora del servicio más económica compitiendo con otras tres.
Fuente
Jueves 02 de diciembre de 2010 Eduardo Camacho | El Universaleduardo.camacho@elunversal.com.mx
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Al ser México un país clave en materia de telecomunicaciones y sector eléctrico, la firma española Jiménez Belinchón busca crecer su participación en este mercado, además del centro y sur de América. Juan Manuel Encinas Vázquez, director general de Jiménez Belinchón México, explicó que la firma opera en diferentes sectores como eléctrico, telecomunicaciones, energías renovables y eficiencia energética, construcción industrial y construcción modular, este último a través de su filial Mundoforma.
“Entre nuestra cartera de proyectos importantes destacan los destinados al sector solar fotovoltaico, termosolar, eólico, biomasa y biogás, además de la gestión y proyecto en el área de la eficiencia energética, los cuales poco se aplican en México, pero el objetivo es abrir ese nicho de mercado”, dijo.
En ese sentido, el grupo está consolidado como uno de los principales promotores de energías renovables en Italia, donde tiene previsto realizar inversiones superiores a los 150 millones de euros en los próximos tres años, para la promoción de varias plantas de biomasa, biogás y solar fotovoltaica.
La empresa, nacida en la década de los años 60 como una empresa familiar, y que ante el crecimiento constante se consolidó con un holding de empresas, llegó a México en 2009, logrando importantes contratos, aunque ya tenía presencia en el país desde 2002. Genera 85 fuentes de empleo directas y 120 indirectas, esperando crear más al invertir en una planta en el centro de la república.
¿Por qué llegar a México?
La firma tiene tres líneas de negocio: telecomunicaciones, sector eléctrico y energías renovables, y como muchos de nuestros clientes en España también tienen presencia en México —Ericcson, Telefónica—, nos parecía una sociedad natural, pues ya nos conocemos.
¿En México quiénes son sus clientes?
En el sector eléctrico participamos en licitaciones para la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que pide torres para líneas eléctricas o de telefonía. Actualmente participamos en licitaciones para el Distrito Federal y Oaxaca, entre otros; también estamos participando en una licitación de un campo solar en Agua Prieta y asociándonos con muchas empresas enfocadas a energías renovables, de manera que ellas hagan una parte y nosotros otra; pero estamos iniciando con ese tipo de energías. En telecomunicaciones para Telefónica, Telcel, Telmex, Iusacell, pero no tenemos el contrato directo con esas compañías sino a través de los fabricantes como Ericcson y Nokia por ejemplo, para llegar a los operadores.
¿Cómo están divididas sus ventas?
El 95% seguramente es del sector de telecomunicaciones mientras que el restante es del sector eléctrico y en cuanto a las energías renovables es mínimo lo que hemos logrado pues lo estamos iniciando.
¿Qué retraso tiene México en energías renovables?
En otros países el despegue de energías renovables depende mucho de los incentivos fiscales y aquí hay bastantes a la autoproducción. La parte solar tiene un buen impacto en el norte (Hermosillo y Mexicali), donde hay campos muy grandes para ello. El biogás tiene mucho apoyo sobre todo en gobiernos estatales y municipales, los eólicos están iniciando.
¿El gobierno está interesado?
Sí, está el Programa Especial para el Aprovechamiento de Energías Renovables, es del gobierno con un plazo de cuatro años. Aún falta bastante por hacer aunque ya existen proyectos funcionando en diversas zonas del país.
¿En cuántas licitaciones participan?
Con la CFE estamos en tres, en construcción modular en dos y una en energía muy grande que es la de Agua Prieta; mientras que en telecomunicaciones no se hacen licitaciones, todo se maneja por contratos. En el sector de telecomunicaciones por lo regular te encargan trabajos que pueden ir de 3 mil pesos a 6 millones de pesos; en el eléctrico es muy diferente, pueden partir de 3 a 10 millones de pesos. En promedio durante 2009 recibimos dos mil 200 pedidos de distintas cosas y queremos crecer potencialmente para cerrar 2010 con tres mil pedidos.
¿Qué nivel tienen las telecomunicaciones en México?
A diferencia de Europa y de España, aquí en México veo mucho más desarrollo, porque ahora mismo están las licitaciones de frecuencias donde participan más operados, además cuentan con mucho desarrollo de redes.
En Europa todo es más estabilizado y no hay mucho por construir, por eso vemos más posibilidades de negocio y en los próximos dos años se dará un boom en cuanto a construcción de telecomunicaciones. Los operadores actuales están muy cómodos en cómo se han realizado las cosas; la entrada de otros competidores al mercado moverá el sector y con ello la gente se beneficiará con nuevos teléfonos y mejores precios.
¿Qué tan fuerte es la competencia?
Hay mucha, por ejemplo, para empresas como Telefónica o Ericcson trabajan cinco empresas grandes y para otras de 20 a 30 como Nokia, porque muchas son pequeñas y trabajan en un estado determinado como San Luis Potosí. La diferencia entre ellas y nosotros es que buscamos tener presencia en todos los estados del centro y las Bajas Californias.
¿Qué porcentaje ocupan en el mercado?
Con los operadores grandes tenemos 20%, que es instalación de equipo, y con aquellos que estamos iniciando relaciones, como Nokia, es menor.
¿Es compleja la licitación que ustedes realizan en el sector eléctrico?
Sí, porque se compone de dos aspectos: el técnico y administrativo. En el primero tienes que cumplir con unas especificaciones que son muy características de lo que necesita CFE, por lo tanto no se trata de un producto que tengas en otro lado y puedas copiar fácilmente, sino que se desarrolla exclusivo para ellos; en el otro, la documentación que resolicitan es muy detallada; en nuestro caso, como la casa matriz está en España, tenemos que presentarles los documentos.
¿Cómo ve el sector eléctrico mexicano?
Creo que va a mejorar mucho con la adquisición (sic) de Luz y Fuerza del Centro, considero que se está trabajando mucho en la calidad del servicio; también conocemos a detalle otros proyectos que realiza CFE para renovar la red eléctrica y líneas enteras, que incluyen desde los cables hasta las torres; desde luego van a necesitar tiempo para ponerse al día porque parte del presupuesto se ha ido a la modernización del sector.
¿Todo el equipo que comercializan en México es importado?
Algunas torres sí, pero al ganar una licitación recientemente estamos viendo a estados en particular (Querétaro, Veracruz o Mexicali) donde podríamos construir una fábrica, pero todo dependerá de dónde tengamos margen de mercado y así reducir costos de transportación; probablemente en los próximos meses seguiremos importando materiales para después producirlos localmente, iniciando con accesorios para torres eléctricas y después las mismas torres. Estamos viendo posibles socios y proveedores de materia prima, por ejemplo, el hierro se podría comprar aquí y nos beneficiará mucho, pero por lo pronto nos apoyamos de las tres plantas en España.
¿Aumenta mucho el costo del producto por concepto de importación?
Al inicio pensamos que sí, pero fue todo lo contrario; cuando participamos en una licitación, resultamos ser la prestadora del servicio más económica compitiendo con otras tres.
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