Sindicalismo mexicano está preocupado: Cardona

Miércoles, 31 de Marzo de 2010


Con la pretendida reforma laboral que promueve el gobierno de México se va a legalizar lo que ya se aplica en el sector productivo como desaparecer la jornada laboral de ocho horas, la desaparición de las horas extras y el contrato individual, en lugar de colectivo.

Para pugnar por la libertad sindical en México, así como para secundar demandas como la de los ex trabajadores de la extinta Luz y Fuerza del Centro, la huelga de Cananea y la lucha de Pasta de Conchos recorre la república mexicana el cubano Ramón Cardona, el nuevo secretario para América de la Federación Sindical Mundial.

El recién nombrado dirigente, acompañado por representantes de la Central Unitaria de Trabajadores en México, señaló que observa una preocupación por parte del sindicalismo mexicano por las reformas laborales que se pretenden implementar, que contradicen no sólo a la propia ley mexicana, sino los tratados internacionales del trabajo y de derechos humanos.

La Confederación Sindical de las Américas, también se adhirió al rechazo a la actuación del gobierno mexicano en relación al Sindicato Mexicano de Electricistas, "en este caso las dos agrupaciones estamos en la misma postura, al igual con los cambios laborales que se pretenden implementar como es el pago por horas, lo cual contraviene a la jornada laboral de 8 horas, lo que costó la sangre de muchos trabajadores en el mundo".

DESCUIDO A CAMBIO DE…

Opinó que el Banco Interamericano de Desarrollo insiste en incrementar la productividad en América Latina, "de ese estudio hemos hecho algunos análisis y de ahí se desprende la justificación a la reforma laboral en México, pero para nosotros el ser competitivo tiene que ver con cómo se acumule la riqueza que se genera, tiene que ver con el nivel de inversión que existe de los medios de producción, no sólo es un asunto de los trabajadores como lo pretende hacer ver esta institución".

Indicó que estas condiciones que se plantean en la reforma, se dan desde hace muchos años en las maquiladoras de la frontera norte del país.

"La ley dice que tienen que trabajar 48 horas a la semana, tienen un día de descanso, pero la empresa les propone dos días de descanso, pero de lunes a viernes van a trabajar nueve horas y entonces la novena hora que debería de ser pagada como jornada extraordinaria a salario doble o triple, se le paga normal".

Agregó que el salario de 100 pesos en promedio no ajusta y la gente se queda a trabajar horas extras y "vemos a la gente trabajando 12 y 13 horas al día y la casa, la escuela y los hijos descuidados".

Por Sofía Noriega

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