Agotado, el sistema neoliberal: alcaldes

Marcelo Ebrard, jefe de Gobierno del Distrito Federal, ofreció ayer una conferencia de prensa en la que anunció la Cumbre Mundial de Líderes Locales y Regionales 2010. Lo acompañan Elisabeth Gateau y Francesca Ramos Morgan, coordinadora general de asuntos internacionales del GDFFoto María Meléndrez

Gabriela Romero, Laura Gómez y Bertha Teresa Ramírez

Periódico La Jornada
Miércoles 17 de noviembre de 2010, p. 42
Alcaldes de distintos países consideran que el modelo neoliberal está agotado y genera pobreza, desigualdad y violencia.

Entrevistados por separado al arrancar ayer los trabajos preparatorios de la Cumbre Mundial de Líderes Locales y Regionales 2010, que tendrá lugar el 21 de noviembre en la ciudad de México, señalaron que en estos días se analizará, entre otros temas, cómo ha afectado la crisis económica a las ciudades.

El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, explicó: “veremos qué queremos hacer en las ciudades frente a la crisis que está viviendo la economía global, la cual no se ha podido superar”.

Puntualizó que la preocupación inmediata es el desempleo y las perspectivas para la próxima generación, “dadas las circunstancias económicas que vivimos en este momento”.

Además se discutirá qué tipo de ciudades vamos a tener en 2030 y qué deben hacer las ciudades del mundo para lograr que haya equidad, sustentabilidad, otro tipo de movilidad, nueva tecnología, reducción de la huella de carbono y nuevos fundamentos en la convivencia urbana.

Tenemos una gran responsabilidad

Sandrine Salerno, alcaldesa de la ciudad de Ginebra, Suiza, afirmó que las crisis económica, social y ambiental que se viven desde octubre de 2008 están ligadas al sistema neoliberal, que ha puesto lo económico al centro, sin ocuparse de lo social.

“En este sistema los seres humanos y el ambiente pagan caro, porque no se da cuenta de los derechos humanos ni de los recursos que se destinan a este rubro”, dijo.

Explicó que las ciudades deben buscar modelos que involucren a los ciudadanos. “Los alcaldes tenemos una gran responsabilidad, y aunque no tengamos los recursos financieros, debemos tener un discurso claro sobre las consecuencias de un sistema neoliberal.”

Afirmó que es muy importante tener un sistema abierto y democrático, “y no dejar al poder económico, de los bancos o de los países ricos la posibilidad de decidir cómo debe ser el mundo”.

Johnny Anaya Monge, alcalde de San José, capital de Costa Rica, señaló que no es partidario del neoliberalismo. Agregó que en este momento “hay un debate sobre nuevos modelos que garanticen una mejor distribución de la riqueza mundial”.

Consideró que “no es excluyente el objetivo de buscar economías altamente competitivas con economías que tengan instrumentos eficaces de distribución más equitativa de la riqueza”.

Señaló que en San José se trata de desarrollar un modelo de ciudad más incluyente y competitivo para que sea generador de empleo.

El alcalde electo de Asunción, capital de Paraguay, Arnaldo Samaniego, externó que el gobierno de esa localidad “apuesta al libre mercado, a la libre competencia de la oferta y la demanda, a la regulación moderada del Estado”. Consideró que “garantizar la competencia es apostar al desarrollo económico y social del país”.

Señaló que seguirá un modelo participativo donde sin exclusión se fomentará el desarrollo para “reducir el desempleo y la inseguridad, que hoy son la nota penosa en nuestra ciudad y en el país”.

Para Royer Porras Zambrano, representante de la municipalidad de Machala, ubicada al suroeste de Ecuador, el modelo actual de ciudades ha llegado a su límite. “Hoy debemos impulsar nuevas estrategias para satisfacer la demanda de los ciudadanos en materia de empleo, transporte, servicios y ambiente, y reducir la desigualdad y pobreza que impera en los países latinoamericanos, donde es más visible y ha derivado en violencia.”
A la gente “ya no le importa si el proyecto a poner en marcha para lograrlo es de derecha, izquierda o centro, sino un compromiso real de sus gobernantes para lograr esos objetivos y evitar un crecimiento mayor de pobreza y/o violencia, cuando ya hemos rescatado las cosas positivas del neoliberalismo y debemos ver hacia otros horizontes”, agregó.

Las ciudades requieren de un alcalde que trabaje para acabar con la desigualdad, que afecta a miles y miles de personas, y son el clima de inseguridad; que genere empleos suficientes para evitar que la gente mire hacia otras alternativas y tome en cuenta a la gente en su política de planificación, para “resurgir y ponerse a la vanguardia ante los cambios que se avecinan”, consideró.

Santiago Redolledo, alcalde de la municipalidad de La Cisterna, ubicada en el sector centro-sur de la capital chilena, advirtió que el liberalismo en sí mismo no soluciona los problemas, y esto se ha demostrado históricamente y en el presente.

“Se deben combinar algunos elementos del neoliberalismo con una sociedad más justa, más igualitaria, solidaria, donde no tengamos la riqueza concentrada en grupos económicos y una gran masa que todavía sigue siendo pobre, particularmente en América Latina.”

Puso de ejemplo el gobierno de Augusto Pinochet, quien “aplicó esto en grado sumo y por eso ganamos el plebiscito, pero cuando volvió la democracia, a comienzos de los 90, nos encontramos con un 48 por ciento de pobreza y no más de uno por ciento de los chilenos era dueño de los bancos, de la minería, de la industria”.

Refirió que en la administración de Michelle Bachelet la pobreza se redujo de 48 a 13 por ciento. “Ahora nos preocupa el gobierno de Sebastián Piñera, que es de centro derecha, y en un primer presupuesto terminó con algunas políticas sociales.”

Con la experiencia que se ha tenido de los gobiernos neoliberales, sobre todo en América Latina, el alcalde resumió: “en todas las partes donde se aplicó este modelo se generó más pobreza”.

Remarcó que se requiere de políticas públicas que apunten a una concepción más humana, que se respete el derecho de los trabajadores, que se cuente con un sistema de protección social desde que se nace hasta que se muere. “Un tipo de sociedad más justa y menos robotizada.”

Integración, la tendencia

David Morales, alcalde de la Isla de Maipo, comuna de la zona central de Chile, consideró esos modelos “un fracaso”. Apuntó que “está demostrado que las tendencias modernas avanzan hacia la integración, hacia recuperar el Estado de bienestar, sobre todo en países de Latinoamérica, donde el eje de nuestra discusión debe ser la superación de la pobreza y la distribución de los ingresos”.

Ramiro Nava Díaz, alcalde de Popayán, ciudad colombiana localizada en el valle de Pubenza, indicó que “el liberalismo ha traído consecuencias comunicadas al desarrollo social de los países”. Consideró que el equilibrio es fundamental en todas las formas de gobierno y que apostar a la nutrición infantil y al deporte “lógicamente traerá oportunidades para la gente, así como inclusión y disminución de la pobreza”.

Indicó que sigue un modelo participativo en el que se prioriza la inversión en nutrición infantil, “porque creemos que es la forma de que los niños desarrollen su capacidad intelectual; la segunda política más importante es la educación”.

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