Pemex-Mexlub, fraude por 40 mil millones
28. agosto, 2012
Autor: José Reyez Destacadas, Rendición de cuentas, Semana
Contralínea
A pesar de las irregularidades en que incurrió Mexlub, y que significan pérdidas económicas para Petróleos Mexicanos por casi 40 mil millones de pesos, la subsidiaria Pemex Refinación decidió iniciar una “nueva relación” comercial con la empresa. En 20 años de sociedad, Mexicana de Lubricantes nunca reportó a la paraestatal un sólo centavo de ganancias
El caso de Mexicana de Lubricantes (Mexlub) es un ejemplo de que la
asociación de Petróleos Mexicanos (Pemex) con capital privado no es
garantía de eficiencia y transparencia ni es la panacea para su
desarrollo. Luego de casi dos décadas, tres sexenios, varios directores
corporativos y pérdidas económicas en perjuicio del erario por 40 mil
millones de pesos, el Consejo de Administración de Pemex Refinación
acordó “el restablecimiento de la vida corporativa y comercial en
Mexlub, sin que implique ningún tipo de impunidad jurídica”.
En la sesión del 21 de agosto pasado –prevista para el miércoles
22, pero que se adelantó por la agenda del director general de Pemex,
Juan José Suárez Coopel– el Comité de Auditoría y Evaluación de
Desempeño (grupo de profesionales independientes de la paraestatal)
avaló la propuesta que presentó el titular de la Oficina del Abogado
General (OAG) de Pemex, Marco Antonio de la Peña Sánchez, sobrada de
irregularidades en que habría incurrido Mexlub, como se adelantó en el Semanario Contralínea edición 37, del 19 de agosto de 2012.
Entre las anomalías destacan: el desistimiento de todos los juicios
penales, mercantiles y laborales, sin reserva de acción alguna de las
partes; solventar los créditos irregulares otorgados por Mexlub a otras
empresas y los contraídos con bancos; dictámenes fiscales de Mexlub no
presentados ante el Servicio de Administración Tributaria; adeudos a
cargo y garantías otorgadas por esta empresa a Sultana de Lubricantes y
Lubrimar, y presentados como “operaciones normales”; o desistimiento de
la denuncia penal por administración fraudulenta en contra de Salvador
Martínez Garza, presidente de Mexlub.
Además, la Comisión Federal de Competencia emitió una resolución
por la que se acreditó la comisión de prácticas monopólicas por parte de
Pemex Refinación, debido a los contratos de exclusividad contenida en
los contratos de franquicia con Impulsora Jalisciense, dueña de la marca
Mexlub.
Mexicana de Lubricantes se constituyó el 19 de enero de 1993. El
contrato de coinversión fue firmado por Fernando Manzanilla Sevilla,
entonces director general de Pemex Refinación, y Martínez Garza,
administrador único de Impulsora Jalisciense. Pemex Refinación adquirió
147 mil acciones de la serie B de la empresa, por una suscripción total
de 176 millones 204 mil pesos; en cambio, 153 mil acciones de la serie
A, por un monto de 183 millones 396 mil pesos, estuvieron a cargo del
otro socio.
En el lucrativo negocio de lubricantes el problema estriba en que
aún cuando Pemex posee el 49 por ciento de las acciones, en los 19 años
de existencia de la compañía, la paraestatal quedó al margen de toda
decisión y, peor aún, no ha obtenido ni un solo peso de ganancia. Las
pérdidas ascienden a casi 40 mil millones de pesos.
Entre los asuntos comerciales propuestos por Mexlub para el cierre
del conflicto está un contrato de venta de primera mano de aceites
básicos (paranínficos y nafténicos), donde Pemex Refinación se obliga a
suministrar a Mexicana de Lubricantes 4 millones 500 mil litros (por
mes) durante un lapso de 10 años; la extinción de la obligación de
exclusividad de venta de lubricantes, la terminación del contrato de
maquila y la apertura de una licencia de uso de marcas.
Al estampar su firma en el acuerdo, los miembros del Comité de
Auditoría y Evaluación del Desempeño de Pemex avalaron el acuerdo para
dar por concluido el contrato de coinversión entre ambas empresas, cuyo
clausulado el propio Comité independiente desconoce, por lo que habrían
incurrido en responsabilidad sancionada por la Secretaría de la Función
Pública.
La propuesta de la Oficina del Abogado General de Pemex, cuyo
titular es Marco Antonio de la Peña Sánchez, fue dada a conocer al
Comité independiente el 15 de febrero pasado, denominada propuesta de la
Administración de Petróleos Mexicanos y Pemex Refinación para el
restablecimiento de las relaciones comerciales y corporativas con
Mexicana de Lubricantes, de conformidad con el acuerdo CA-070/2011 del
Consejo de Administración del 5 de julio.
Para dar cauce a la propuesta, el Consejo de Administración de
Pemex mandató la creación de un comité especial en la asamblea de
accionistas de Mexlub, celebrada el 27 de julio de 2010, informe
contenido en la exposición que realizó el titular de la OAG de la
paraestatal ante los miembros del Comité de Auditoría y Evaluación del
Desempeño el 15 de febrero de 2012, en el que se abordaron las múltiples
irregularidades de Mexlub.
En el Informe del resultado de la fiscalización de la Cuenta Pública 2010,
la Auditoría Superior de la Federación considera que Pemex Refinación
no cumplió con las disposiciones normativas aplicables, por lo que el
dictamen de la revisión financiera y de cumplimiento 10-1-18T4M-02-0731
fue negativo (Contralínea 288).
En los estados financieros de 2010, Pemex presenta 157 millones 93
mil pesos por acciones en Mexicana de Lubricantes; además, una reserva
del 80 por ciento (más de 600 millones de pesos), que no fue sustentada.
La inversión del ente gubernamental en Mexlub, hasta el momento, ha
sido infructífera e inútil: no ha obtenido dividendo alguno.
A partir del 15 de diciembre de 2004, los contratos se suspendieron
debido a las resoluciones dictadas por la autoridad judicial. Desde
entonces, transcurrieron casi ocho años y Pemex Refinación no llevó a
cabo acciones suficientes en el seguimiento de este asunto. Hay 14
juicios, algunos de ellos aún bajo el escrutinio del Órgano Interno de
Control y de la Procuraduría General de la República, por premeditada
negligencia de funcionarios adscritos a la Oficina del Abogado General.
Gabriel Reyes Orona, director de Transparencia Nacional, define el
caso de Mexlub como “uno de los cinco que más ha impactado las finanzas
de Pemex”. Destaca el papel de los abogados de Pemex, quienes, “se
vieron implicados en omisiones y actos deliberados para que el asunto
fuera contrario a Petróleos Mexicanos” (Contralínea 288).
Así, dice el especialista, el caso de Mexlub es un ejemplo de que
la asociación de Pemex con capital privado no es garantía de eficiencia y
transparencia, ni es la panacea para su desarrollo.
Sin duda el negocio petrolero ha sido redituable, tanto que el
director de Mexlub se hizo dueño de uno de los equipos de futbol más
taquilleros del país, el emblemático Club Deportivo Guadalajara
(conocido popularmente como las chivas rayadas), equipo que conoció como
patrocinador de la marca Texaco que el rebaño sagrado portó
impreso en la parte frontal de sus playeras durante la temporada
1993-1994. Aficionado a este deporte y cierto del lucro que éste
representa, el socio de Pemex proyectó en 2011 la compra de otro equipo,
el Atlas o los zorros rojinegros, cuya marca está valuada en 60
millones de dólares (Contralínea 288).
La propuesta, presentada ahora por las administraciones de Pemex y
Pemex Refinación, ha sido respaldada por el Comité de Auditoría y
Evaluación del Desempeño: José Fortunato Álvarez Enríquez, presidente,
Fluvio César Ruiz Alarcón y Héctor Moreira Rodríguez, vocales, miembros
con voz y voto.
Álvarez Enríquez, en la 32 Sesión Ordinaria del Comité realizada el
15 de febrero pasado, señaló: “Estimo conveniente establecer un
convenio con Impulsora Jalisciense, con la orientación a que Pemex
Refinación no tenga desventajas, más de las que ya ha obtenido,
reconociendo que ha habido una administración en Mexicana de
Lubricantes, si bien no reconocida como fraudulenta, sí irresponsable y
ventajosa al actuar de manera unilateral sin tomar en cuenta al socio
minoritario”.
En su boletín 48/2012 del 21 de agosto pasado, titulado “Se reúne
el Consejo de Administración de Pemex Refinación”, la paraestatal da
cuenta de los acuerdos aprobados en la sesión, entre los que destacan:
“reiniciar las sesiones periódicas del Consejo de Administración de
Mexicana de Lubricantes, revisar y aprobar los estados financieros que
estén pendientes, determinar el cobro de dividendos para recuperar
capital y realizar la apertura del mercado de lubricantes en las
estaciones de servicio.
También se acordó implementar medidas de gobierno corporativo que
garanticen a futuro los derechos de minoría de Pemex Refinación, así
como establecer controles que mejoren la vigilancia, la rendición de
cuentas y el desempeño de la empresa a fin de optimizar las
inversiones.
En este sentido, Petróleos Mexicanos asegura que se constituirán un
comité de auditoría y un comité de remuneraciones, cada uno de ellos
presidido por un consejero independiente. Asimismo, Pemex Refinación
designará a un subdirector de Finanzas en Mexicana de Lubricantes.
Violaciones al Contrato de Coinversión Pemex-Mexlub
Al ratificar el Comité de Auditoría y Evaluación de Desempeño la ratificar el Comité de Auditoría y Evaluación de Desempeño la propuesta de la administración de Petróleos Mexicanos y Pemex Refinación para el restablecimiento de las relaciones comerciales y corporativas con Mexicana de Lubricantes, sus miembros estarían avalando la violación del contrato de coinversión –cuyo contenido al parecer desconocen– entre ambas empresas.El contrato de coinversión establece que Pemex tendría acceso irrestricto a los libros, registros, archivos e instalaciones de la empresa durante horas y días hábiles a fin de inspeccionar, fotocopiar y examinar los mismos; a la fecha, esto no ha ocurrido. No obstante, sí se le obligó a incluir en sus contratos de franquicia con las gasolineras una estipulación en virtud de la cual, éstas deben comprar únicamente aceites y grasas de Mexlub.Mexicana de Lubricantes, a la fecha inaugural, debía comprometerse al pago de 508 millones 400 mil pesos por equipo, maquinaria y derecho de usos de marcas a Petróleos Mexicanos, más el impuesto al valor agregado. Asimismo, informar periódicamente sobre el desarrollo del negocio, de manera enunciativa y no punitiva, bajo los principios de rendición de cuentas y transparencia; presentar oportunamente todas las declaraciones fiscales y pagar el gravamen correspondiente; notificar por escrito la existencia de cualquier litigio, arbitraje o procedimiento que pudiera afectar sustancial y adversamente sus operaciones comerciales o posición financiera.El otorgamiento de préstamos y garantías a través de fianzas o avales; hipotecas sobre cualquiera de sus bienes o activos; contratos para la adquisición o arrendamiento de inmuebles, equipos, servicios o gastos; la celebración, modificación o terminación de cualquier contrato de Mexlub con Impulsora Jalisciense; y el allanamiento, desistimiento o transacción de arbitraje judicial, debía consentirse por el organismo público del gobierno federal. Sin embargo, desde la creación de Mexlub, el 19 de enero de 1993, ha actuado con libre albedrio.
Fuente: Contralínea 299 / Agosto de 2012
Comentarios